Perfil de Francisco, el Papa que nunca se vistió de Prada

Perfil de Francisco, el Papa que nunca se vistió de Prada

10 de may de 2025

El episodio analiza el legado del Papa Francisco, destacando su origen jesuita y su enfoque en los pobres, así como sus desafíos políticos y religiosos.

Capítulos

La elección y el inicio del papado del Papa Francisco

El Papa Francisco, nacido Jorge Mario Bergoglio, es el primer papa jesuita y latinoamericano. Fue elegido en un cónclave en 2013, adoptando el nombre de Francisco en honor a San Francisco de Asís. Desde su elección, ha enfrentado problemas de salud, lo que ha dado pie a discusiones sobre su eventual sucesor.

El telón de fondo jesuita

Los jesuitas tienen un enfoque distintivo dentro de la Iglesia Católica, con un fuerte énfasis en la justicia social y el trabajo con los pobres. Esta influencia es evidente en el papado de Francisco, quien ha pronunciado encíclicas sobre la crisis climática y el cuidado del medio ambiente.

Desafíos y tensiones en el papado de Francisco

Francisco ha enfrentado críticas tanto por su pasado en Argentina durante la dictadura militar, como por su postura crítica respecto al Kirchnerismo, especialmente tras la aprobación del matrimonio entre personas del mismo sexo. Ha sido señalado de no actuar suficientemente durante el secuestro de dos jesuitas en Argentina.

Reformas y legado

Aunque el Papa ha sido criticado por no implementar reformas radicales, ha tomado pasos significativos en la lucha contra la corrupción y el abuso sexual dentro de la Iglesia. Sus gestos simbólicos y su discurso sobre los derechos LGTBIQ+ han marcado su papado como uno de los más progresistas.

La perspectiva de los expertos

Kelly Velázquez describe las expectativas que creó la elección de Francisco, y cómo, pese a las reformas, la rígida estructura eclesiástica ha frenado algunos avances. Francisco ha buscado transparencia y apertura, aunque su salud y la resistencia interna han limitado cambios más radicales.

La visión de Jorge Serrano, un jesuita cercano al papa

Serrano considera que el legado de Francisco se reflejará más en sus gestos que en sus encíclicas. Ve al Papa como un símbolo de cambio que, a pesar de los errores del pasado, ha intentado abrir la iglesia a nuevos caminos.

Conclusión

El legado del Papa Francisco está marcado por sus esfuerzos por modernizar la Iglesia, su enfoque en los pobres y sus gestos simbólicos hacia una mayor inclusividad. Aunque sus reformas en temas económicos y de justicia dentro de la Iglesia no han sido tan radicales como algunos esperaban, ha sentado las bases para un diálogo interno hacia el cambio.

Menciones

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Es papa hace 12 años porque fue elegido en un cónclave del 2013. Y fue entonces que adoptó el nombre de Francisco, porque su nombre real es el de Jorge Mario Bergoglio, un argentino amante del fútbol y un hincha empedernido del San Lorenzo. El Papa Francisco tiene 88 años y es hijo de inmigrantes italianos. Su padre, Mario, era contador y empleado en el ferrocarril, y su madre, Regina Sivori, era una ama de casa. de casa. Bergoglio cursó sus estudios primarios y secundarios en Buenos Aires y antes de entrar en el seminario como novicio de la Compañía de Jesús, fue técnico químico, oiganme bien, luego estudió literatura, una pasión que ha sido muy clara durante su papado. Y en 1979 se convirtió en el superior provincial de los jesuitas en Argentina. En 1992, Juan Pablo II designó a Bergoglio, obispo titular de la diócesis de Oca y uno de los cuatro obispos auxiliares de la arquidiócesis de Buenos Aires. los cuatro obispos auxiliares de la Arquidiócesis de Buenos Aires. Bergoglio, lo decíamos, es el primer papa jesuita, que además es latinoamericano, y es el primero también en llamarse Francisco. ¿Y por qué es importante hacer esta aclaración? Porque los jesuitas, que fue una orden católica romana fundada por San Ignacio de Loyola, tiene una aproximación muy distinta a la iglesia tradicional, a la iglesia llamada jerárquica, porque es una iglesia más dedicada a los pobres y menos a las fanfarrías del poder, del Vaticano y de Roma. a las fanfarrías del poder del Vaticano y de Roma. Fueron precisamente los jesuitas que en los años 60 irrumpieron con su teología de la liberación, un movimiento que conmovió a la Iglesia en el mundo porque volvía a recordarle al Vaticano que la Iglesia tenía el deber de estar siempre con los oprimidos y con los pobres. Ese movimiento se originó precisamente en Medellín y luego se dispersó por toda América Latina y se asentó especialmente en Brasil desde la década de los 60. Durante el papado de Juan Pablo II se diseñó la estrategia para acabar con la teología de la liberación y muchos de los jesuitas que desarrollaron este movimiento y que lo protagonizaron y lo lideraron fueron castigados y sobre todo aquí en Latinoamérica y el encargado de hacer esa limpieza entre comillas fue nada más ni nada menos que un obispo colombiano Alfonso López Trujillo que era una de las personas más cercanas del entonces Papa Juan Pablo II. Con el Papa Juan Pablo II se aplastó a la teología de la liberación y de alguna manera podemos decir que la iglesia jerárquica tradicional volvió a retomar el control del mundo católico. El Papa Juan Pablo II, sin duda, fue el Papa más político, porque jugó un papel muy clave en la caída de muchos de los presidentes de Europa del Este, que eran afines a la Unión Soviética. No lo digo yo, sino lo han dicho sus biógrafos, que el Papa Juan Pablo II era, sobre todo, un pontífice anticomunista. Una realidad que él nunca escondió y que la vivió en carne propia, porque era polaco y vivió en carne propia lo que fue la expansión soviética luego de la posguerra. Y para él, la teología de la liberación que se propagó en América Latina era también una amenaza porque se la consideró en su momento y de manera equivocada como una aproximación marxista. como una aproximación marxista. Yo tuve la oportunidad de conocer a muchos jesuitas que terminaron condenados a vivir en los pueblos más abandonados de Colombia, todo porque eran partidarios de la teología de la liberación y de una visión de que la iglesia debía estar siempre con los pobres y no vestida de joyas, ni de anillos con diamantes, ni esmeraldas, ni con zapatos de prada. De ahí lo significativo que resultó la llegada de Francisco en el 2013 al Vaticano como primer Papa Jesuita. Sin embargo, desde el comienzo Francisco fue muy claro en decir que como pontífice compartía algunas de las principales preocupaciones teológicas con la teología de la liberación, sobre todo su compromiso con los pobres, pero que había otras con las que no estaba de acuerdo. Otro episodio que revela el calado político que traía este jesuita al llegar al Vaticano tuvo que ver con el supuesto silencio que habría tenido Bergoglio durante la dictadura militar en Argentina entre 1976 y 1982 y en concreto con un episodio de dos Jesuitas Franz Jalisk y Orlando Llor, quienes fueron apresados durante la dictadura. Y a Bergoglio se le señaló de no haber hecho lo suficiente para impedir que la dictadura los capturara. Como presidente de la Conferencia Episcopal Argentina durante seis años, Bergoglio criticó abiertamente muchas de las decisiones políticas del kirchnerismo. la muerte de su esposo Néstor Kirchner, la figura de Bergoglio como opositor espiritual se volvió mucho más evidente y clara. Y el desacuerdo más grande se produjo en julio del 2010 con motivo de la aprobación del matrimonio entre las personas del mismo sexo. Bergoglio escribió una carta pastoral en la que criticaba duramente la iniciativa. Abre comillas. Aquí también está la envidia del demonio por la que entró el pecado en el mundo que arteramente pretende destruir la imagen de Dios, hombre y mujer que reciben el mandato de crecer, multiplicarse y dominar la tierra. No seamos ingenuos. No se trata de una simple lucha política. Es la pretensión destructiva al plan de Dios. No se trata de un mero proyecto legislativo. Este es sólo el instrumento, sino de una movida del padre de la mentira que pretende confundir y engañar a los hijos de Dios. Así hablaba Bergoglio. La respuesta de la presidenta Kirchner no se hizo esperar. Me preocupa el tono que ha adquirido el discurso. Se plantea como una cuestión de moral religiosa y atentatoria del orden natural, cuando en realidad lo que se está haciendo es mirar una realidad que ya está. La verdad es que el día que Jorge Mario Bergoglio fue elegido en un cónclave en el 2013 como el nuevo papa, la más contenta de que se fuera de Argentina era Cristina Kirchner. Lo interesante de Bergoglio es que cuando llegó al Vaticano, con todas las expectativas que suponía la llegada de un jesuita al Vaticano, fue cambiando muchas de sus reflexiones sobre los desafíos que tenía la iglesia. Y aunque evidentemente tenía unas grandes discusiones sobre la teología de la liberación, sí apuntaló nuevos caminos. Y fue el primer papa que dijo expresamente que ser gay no era un delito. Y fue también el primer papa en decir quera varias e importantes mujeres dentro del Vaticano. del Vaticano. En sus 12 años, el Papa Francisco ha publicado cuatro encíclicas, que son como los legados grandes que dejan los papados. Las encíclicas son cartas solemnes que el pontífice dirige a los obispos y a sus fieles para que sean asumidos como principios rectores e inviten a una reflexión. La primera encíclica que publicó el Papa fue el 29 de junio del 2013 y habla por primera vez de la necesidad de crear una conciencia para proteger el planeta de la crisis climática y ecológica. Es el primer papa que habla sobre ese tema. En el 2015 publica otra encíclica, también dirigida a cuidar el planeta y que se denomina Nuestra Casa Común. Aborda el tema ya directamente de la crisis climática y defiende la gestión ambiental. Su tercera encíclica la publicó cinco años después, en medio de la pandemia y el coronavirus. Y la última fue el año pasado, en el 2024, en la que indaga sobre el amor humano y divino del corazón de Jesucristo. Sus críticos dicen que Francisco pudo haber hecho mucho más, haber ido más allá como jesuita que es. Otros que lo conocen muy bien y que tienen claro que Bergoglio nunca fue un jesuita que le apostó decididamente a la teología de la liberación, cambió lo que pudo cambiar en una iglesia que se resiste a las reformas y que se aferra al pasado y que, en el fondo, le teme a los cambios. Bienvenidos a este podcast donde vamos a analizar cuál es realmente el legado que está dejando este Papa, el Papa Francisco, el primer Papa Jesuita que llegó al Vaticano. Está con nosotros el Padre Jorge Serrano, mejor conocido como El Gordo. Él es un jesuita desde los 18 años, cuando su papá tuvo que firmar una carta dándole el permiso para ingresar a la Compañía de Jesús. Él estudió filosofía en Colombia y teología en Brasil. Y ha vivido en muchos barrios populares de Colombia. Él nos va a relatar ese primer encuentro con Bergoglio cuando todavía no era el Papa Francisco. Yo conocí a Bergoglio cuando yo era novicio del primer año. O sea, era un niño chiquito que me metí de cura así todavía sin saber dónde me estaba metiendo. Y un día el maestro novicio nos dice que va a venir un padre que el padre general acaba de nombrar maestro novicio en Argentina y que está visitando los noviciados de toda América Latina, pasando por México, Centroamérica, Colombia, Chile. Colombia, Chile, para tener experiencia, porque acaba de terminar sus estudios teológicos, él va, nos habla, nosotros unos mocosos, ni le paramos bola, nos toca ir allá, sentarnos a hablar con él, él nos hace preguntas, no me acuerdo que nos habrá preguntado, ni que le respondimos, pasó, estando en Roma, ya es de papa, recién nombrado y visita la casa nuestra y al final del almuerzo subimos al café para tomar un café y donde cada uno lo va a saludar perdón, y entonces en el momento de la foto que todos queríamos tener la foto ahí privada con el Papa yo le digo, Jorge Mario, yo a usted lo conozco desde el año 69 cuando usted pasó por la ceja Antioquia y el hombre dice claro, el padre Fernando Londoño me llevó al noviciado, ¿cómo sigue el padre de Caicedo? y yo le digo, no, él ya falleció o sea, de una memoria impresionante tenía más ubicado ese encuentro que yo, porque si a mí me pregunta él, ¿se acuerda lo que yo dije? Me toca decirle qué pena, Jorge, no tengo ni idea de qué fue lo que habló, porque éramos unos mocosos. Pero, ¿y quién era Bergoglio realmente antes de llegar al Vaticano? Aquí lo explica muy bien el sacerdote jesuita Jorge Serrano. Bergoglio llega a Argentina recién graduado. O sea, es un muchacho, digo yo, de 30 años, 35 probablemente, porque estaba haciendo un doctorado. Y llega a ser maestro de novicios y luego lo nombra en provincial en un espacio donde la generación anterior casi todavía ha desaparecido la provincia, como sucedió en Colombia y en toda la compañía. Es todo el fenómeno posterior al Vaticano II que genera una salida masiva de curas y monjas que sienten que la congregación no responde a los desafíos que el Vaticano II nos está proponiendo. Y él llega recién graduado, nombrado por el general para ser el maestro novice. Es un hombre muy disciplinado y empieza a tratar de poner orden allá porque allá estaba la división, era muy grande, como aquí. La división de la que habla era precisamente la división que existía en ese momento en los esuitas, a partir de la irrupción de la teología de la liberación. Pero además de esa división que era latente y que estaba haciendo historia, Bergoglio llegaba a un país que estaba dominado por una bota militar, por una junta militar que estaba cometiendo toda clase de atropellos a los derechos humanos. Cuando en 1976 se produce el golpe militar en Argentina y se derroca al peronismo, Bergoglio era el provincial de los jesuitas en Argentina. Y es en ese momento, en ese periodo, en el que sucede el secuestro de dos jesuitas que él conocía porque trabajaban en un barrio de Buenos Aires. Y es por cuenta de ese episodio que muchos en la Argentina dijeron en ese momento que Bergoglio no había hecho lo suficiente para evitar el secuestro de esos dos jesuitas. Un hecho que ha sido utilizado en contra de Bergoglio para decir que tuvo una relación con el gobierno de facto, encabezado inicialmente por el general Jorge Videla. Incluso el diario argentino, en su momento Página 12, publicó en el 2010 un informe en el que se le acusaba de haber colaborado con las autoridades de la época. No obstante, en su libro autobiográfico, escrito por Bergoglio en el 2010, es decir, tres años antes de que llegara a ser papa, rechazó las acusaciones y dijo, hice lo que pude con la edad que tenía y las pocas relaciones con las que contaba para abogar por personas secuestradas. Y reveló que sí se reunió con el general Videla en su momento para reclamarle por la vida de esos dos curas. Y según muchos defensores del hoy Papa, fue también muy evidente como Bergoglio escondió y ayudó a exiliarse a varios jesuitas que estaban siendo perseguidos por el régimen. Según el jesuita Jorge Serrano, lo que sucedió con Bergoglio tiene mucho que ver con el clima anticomunista que se estaba viviendo en ese momento. Yo pienso por lo que le pasó a muchos miembros de la iglesia del miedo al comunismo. Entonces los grupos armados, los grupos de oposición, normalmente habían roto con la iglesia o con la fe y representaban una amenaza para las iglesias. Y Bergoglio en ese momento se alinea en lo que él creía que era la fidelidad a la iglesia. Entonces, hay jesuitas allá y aquí y en todos los países que están en el borderline, o sea, están en la situación en que están comprometidos con los pobres por el evangelio, pero están vinculados a organizaciones que no están vinculadas a la iglesia, que son enemigas de la iglesia. Y en ese sentido, Bergoglio, la acusación que se le hace es que no defiende a sus compañeros. El caso más público, más publicitado, es de los dos compañeros. Uno de ellos salió de la compañía, ya murió. Y el otro, bueno, ambos ya murieron, pero el otro siguió en la compañía, es un húngaro. Ellos dos estaban siendo parte de lo que llamaban los curas villeros en Argentina, que eran como los curas que se iban aquí a vivir a los Tujurios, Saturnino Sepúlveda, los que trabajaron creando, bueno, ahorita no me acuerdo acuerdo que estaban al sur de Mesa o los que empezaron a ir a la periferia en Buenaventura con el obispo que murió en el avión, el helicóptero de la FAC es un fenómeno en toda América Latina de curas que después del Vaticano II dice el hermano, la prioridad son los pobres, no podemos seguir simplemente recogiendo cosas de los ricos padres a ellos en Navidad si no tenemos que hacer todo el cambio pero no son solo 22, son mucho más, ¿sí? pero estos dos son llevados presos, son torturados, ¿sí? y la acusación que se le hace a Bergoglio es que no no los defendió como provincial ¿sí? él posteriormente en una entrevista que le hace en las revistas de todo el mundo que creo que la dirige la entrevista a la cortina espadano le hacen esa pregunta y él con una humildad y una vaina que no creo que tengamos muchos de nosotros dice me equivoqué en ese momento yo era un tipo muy joven estaba ocupando un puesto que no me correspondía a mí pero se habían salido los que deberían estar de provinciales había una polarización terrible y cometí errores, porque yo tenía que tomar decisión. Y tomé decisiones que no fueron las aceptadas. Pero no, como dicen, no pasé de agache. Y asumo que yo tomé esa decisión. Yo estoy seguro que esa historia personal de él, ese dolor que cuando él sale de provincial, lo mandan de rector de la Universidad de Córdoba, que era como si lo mandaran a uno a rector de la Universidad de Pibijay para allá perdido del planeta y él allá tiene un tiempo digamos así de desierto de mirar, de examinar y cuando regresa como obispo yo estoy convencido que los que lo propusieron de obispo pensaron que era el mismo que se había ido y descubrieron que no porque el hombre anda en metro, cambia la residencia episcopal se va a sustituir a los curas que no descansan los curas villeros que no descansan ese es lo que yo te puedo contar yo no he sido un lean ese es lo que yo te puedo contar yo no he sido un lector de todo lo que él escribe ni de la biografía ni de la antibiografía ni de nada lo sigo como el hombre que para muchos de nosotros ya viejos nos hizo creer que un mundo nuevo es posible que podemos soñar lo imposible con él que él no va a terminar las cosas porque tiene 88 años y además tiene un pulmón y está con una neumonía laverraca pero que está abriendo una dinámica distinta de ser papa y el que venga sea el que sea tendrá mucha dificultad en volver a acomodarse entre los arreos y la guardia suiza tendrá que salir estar en el asfalto independiente de las posiciones morales teológicas, políticas que tenga pero creo que Francisco, desde su experiencia de haberse equivocado y descubrir que se puede corregir, abrió una forma nueva de ser Pablo. Kelly Velázquez, una veterana periodista que trabajó durante muchos años en la FP, en la agencia France Press. Ella fue por muchos años la corresponsal en el Vaticano de la agencia France Press y cubrió a tres papas, Juan Pablo II, Benedicto XVI y al Papa Francisco. Kelly Velásquez va a contarnos las expectativas que creó la llegada de un papa jesuita al Vaticano y hasta dónde esas promesas de cambio realmente se cumplieron en estos 12 años de papado del Papa Francisco? Pues hay como un pontificado, digamos que verlo después de 12 años es un balance, digamos, en parte amargo y en parte no. Porque la llegada del Papa Francisco al Vaticano, su elección, suscitó muchísimas expectativas y efectivamente respondió a esas expectativas. Un Papa que llega y su primera declaración es estar con los pobres. Es decir, va a ser lo primero que dice, como gesto fuerte, es que va a ser el Papa de los Pobres y toma el nombre de Francisco, de Francisco el Santo, el Santo italiano, el Santo Francisco de Asís, que era la representación de una iglesia fuera de ese autoritarismo y de todas las pompas. Luego hace una serie de gestos muy importantes como dejar los zapatos rojos, ir a vivir en la Casa Santa Marta, que era el hotel para los cardenales, y no vivir dentro del Palacio Apostólico con todo lo que eso implica, es decir, a pocos metros de la Capilla Sistina, en medio del renacimiento más costoso. con todo lo que eso implica, es decir, a pocos metros de la capilla Sistina, en medio del renacimiento más costoso. Todos esos gestos eran muy importantes después de un pontificado como el de Juan Pablo II de 26 años o el de Benedicto XVI de 8 años, muy conservadores, y que lo que se podría, que el resumen que se puede decir de esos pontificados es que era todo no, no, no no al aborto, no a las mujeres no, no, no era una iglesia mucho más cerrada y entonces la llegada de Francisco y de un papa latinoamericano de todos modos eso tiene desde mi punto de vista, mucha importancia, porque llega una persona que no estaba acostumbrada a todas las intrigas de la curia romana, del poder de la iglesia, en el eje del poder de la iglesia, que es el Vaticano. Y entonces es un papa latinoamericano que habla de otra manera, que es extrovertida, que se da como primera ley la transparencia, es decir, aquí voy a decir siempre lo que creo, en lo que pienso, con qué estoy y deja atrás eso que siempre identificó la alta jerarquía de la iglesia católica, que es el secreto. Entonces, tantas cosas nuevas empieza a hacer el Papa desde el comienzo. Luego ya empieza y dice muchas cosas importantes, pero todo eso de decir, suscita, despierta, abre puertas, dice una declaración, rompe tabús, es un Papa que rompe tabús, y uno de sus tabús es hablar de los homosexuales, es quién soy yo para juzgarlos, es lo que él dice como declaración más fuerte, y eso en alguna manera cambia la iglesia, pero también genera unas tensiones y unos odios internos que uno como periodista los ve, porque además esas tensiones y esos odios, empieza toda la parte, digamos, hay una iglesia que es fundamentalmente la más contraria al Papa, que es la iglesia norteamericana, la iglesia de Estados Unidos, que además cuenta con muchísimo dinero y que además ha hecho, de Estados Unidos, que además cuenta con muchísimo dinero y que además ha hecho, le hizo una enorme oposición a todo,bres, del papa latinoamericano, que yo creo que de alguna manera él sintió el peso de representar una iglesia latinoamericana que tenía una teología, que tenía una intelectualidad que podía ser digamos no contraria pero que podría tener el mismo peso de esos intelectuales europeos como era Benedicto XVI y lo que representó su pontificado de un hombre extremamente un teólogo refinado digamos entonces llegaba este americano, este hombre del sur, con otra metodología. Ahora, si uno hace un balance de todos esos años, el Papa no pudo hacer esas reformas, o las hizo muy tímidamente, o hasta donde pudo, porque encontró, enfrentó muchas intransigencias y muchos atavismos ancestrales de todo el aparato eclesial, inclusive con respecto a la pedofilia. A la pedofilia, sí. Es uno de los grandes temas de este pontificado, pedofilia, inmigración y paz. Son tres temas que para mí son claves de este papado. Y pues todos temas complicados y difíciles. Para Kelly Velázquez, que cubrió al Papa tantos años, al Papa Francisco, es muy claro que Francisco no venía de la teología de la liberación, pero que a su llegada a Roma se dio cuenta de que tenía una responsabilidad enorme y que tenía que cambiar muchas cosas. Yo creo que él lo sintió, pero él no pertenecía a eso, entonces le fue muy difícil. Él no pertenecía, no venía de la experiencia de los teólogos de la liberación, pero sintió que, yo creo, aquí se dice, en Roma se dice mucho, que los papas cambian. es un cura, no sé si eso el padre Serrano está de acuerdo, pero una cosa es el cura que llega y cuando llegan al pontificado se dan cuenta de la responsabilidad enorme que es ser pontífice y cambian dicen que eso le sucedió a Juan XXIII el Papa Bueno que fue seguramente uno que inspiró a Francisco y además él es elegido pontífice después de una serie de reuniones entre los cardenales en que ellos se dan cuenta que la iglesia tiene que cambiar, que tiene que hacer unas reformas profundas, era una iglesia completamente desacreditada por todos los escándalos de corrupción, pedofilia. Es decir, era una iglesia que había inclusive mantenido a un tipo como Maciel, es decir, el fundador de los Legionarios de Cristo, que era un pedófilo inclusive con sus propios hijos, que tuvo hijos y que además fue pedófilo con sus hijos, es decir, lo más grave de lo grave podría ser y Juan Pablo II nunca quiso, digamos, tener en cuenta a Maciel porque los legionarios de Cristo eran una institución muy cara y que le daba mucho prestigio al Papa Francisco y que le daba mucho dinero y que aportaba y que aportaba cantidades de iglesias y universidades en toda América Latina, en México. Así que en eso Juan Pablo II no quiso mover nada, tapó lo que siempre, como siempre hizo la iglesia, tapar, tapar y tapar. Entonces Francisco se encontró con una iglesia profundamente desacreditada que además tenía que reformar, a la que le piden los cardenales que lo eligen, le esperan en un cambio, cambios muy difíciles, que en esos 12 años hizo, obviamente que pudo hacer muchas cosas, por ejemplo todo lo que fue la corrupción económica, ya la había empezado Benedicto XVI, pero todos esos escándalos de malversación, de recursos financieros que terminaban, no se sabía dónde, todo eso se limpió Digamos que dentro del Vaticano hoy en día hay toda una serie de maneras para que no se reproduzca esa corrupción del pasado. No hizo paso para mí como laica, como externa, que para mí era fundamental. Es decir, salir de ese sistema, es decir, no tener un banco, tener un banco ético que existen. Entonces, pero claro, uno desde afuera ve y dice, bueno, hubiera podido ir más allá, pero de todos modos la iglesia se mueve con unos tiempos completamente distintos, muy lentos, pero eso ya fue un primer paso fundamental. La corrupción económica que reinaba dentro del Vaticano, esa ya no existe, por ejemplo. Eso costó muchísimo descrédito y él lentamente eso lo fue corrigiendo. Es cierto que el Papa Francisco ha llegado más lejos que cualquier otro pontífice en materia de derechos de los gays. Con la frase de que ser gay no es un delito y de que la población LGTBIQ+, es también una población de Dios, es evidente que el Papa Francisco trató de abrir una puerta en una iglesia muy conservadora en esos temas. ¿Fue suficiente esa apertura para modernizar una iglesia que todavía no permite, por ejemplo, que entren mujeres a ser sacerdotes? Aquí una reflexión del padre Jorge Serrano. Hago una cosa anterior a responderte. Nosotros somos los compañeros de Ignacio, la compañía de Jesús. Y se dice que nacimos de los primeros compañeros de Ignacio, que son Francisco Javier, Borg, toda esta gente. Pero los historiadores descubrieron que éramos la tercera, primera compañía de Jesús San Ignacio intentó hacer eso en Barcelona, en Alcalá y luego en París y la primera vez fracasó o sea, lo que sí te hacemos entendido por la experiencia de nuestro fundador que las cosas no cambian porque yo tenga la idea fenomenal clara y distinta para implementarlo sino que yo tenga la capacidad de colocar esa semilla en tierra y que fecunde con la participación de otros cuando hablamos del tema de los gays por ejemplo y de esa frase cuando hablamos del tema de los gays por ejemplo y de esa frase pues la esperanza de todo el mundo es que el Papa creara el dicasterio o el ministerio de la diversidad sexual y que nombrara a un obispo reconocido como homosexual como presidente y una monja que fuera lesbiana como secretaria eso no podía pasar pero que es lo que ha pasado que en todo el mundo como secretaria, y eso no podía pasar, pero ¿qué es lo que ha pasado? Que en todo el mundo, hoy encontramos parroquias, que tienen un programa, un departamento, un equipo que se llama Pastoral de la Diversidad, que se reúnen en la iglesia, cosa que era imposible, y que muchas otras parroquias los persiguen, porque eso va contra el evangelio, contra la castidad. O sea, lo que el Papa hace con esa frase no ha sido crear un nuevo dicasterio que sería burocracia y millones costosos, sino decirle a cada uno de nosotros, hermano, usted es la iglesia, no esperen que yo, Francisco, vaya al barrio tal a reunirme con los gays de esa parroquia. Usted que es el párroco, usted que representa a la iglesia, ¿qué espacio le va a dar a esas personas? ¿Qué espacio le va a dar a los divorciados? Porque es que el tema de los divorciados tiene 500 o 2000 años. El de los gays tiene apenas 100 años. Y seguimos maltratando a los divorciados ¿sí? entonces cuando el Papa habla de que tenemos que, los obispos deben tener tribunales donde se examine seriamente si lo que hubo fue un matrimonio o no, un acto social que no cumple con las características pues no lo hacíamos, pero ahora este hombre está diciéndonos por favor, ustedes son la iglesia no esperen a que el Papa Francisco porque tiene una foto del Papa y del Asobispo es el que les haga, les resuelve el problema usted es el hombre de fe, usted es el que tiene que mirar qué es lo que Dios le está pidiendo hoy cuando usted en confesión oye a las personas decir padre soy gay y cuando comulgo la gente me mira mal. Kelly Velázquez también está de acuerdo en que este papa, Francisco, tomó muchas medidas para frenar el abuso sexual en la iglesia católica, por parte sobre todo de los grandes jerarcas. Hay comisiones, hay estudios, ha creado equipos de personas con sacerdotes sumamente preparados para abordar el tema, es decir, sobre la pedofilia lo ha hecho, pero el problema es que en la sociedad algo pasa en la sexualidad dentro de la iglesia, por ejemplo, tomó muchísimas medidas para los seminarios, es decir, ¿quiénes son los que entran a los seminarios y por qué? Y tener más cuidado sobre eso porque ahí se filtraba una cantidad de personas que venían, podían cometer todo tipo de abusos contando con que el principio era taparlo para que no se supiera. Eso ya no existe, ya no se debe tapar, ya se debe sanar. Entonces están en la fase de curar y para eso efectivamente han hecho muchos pasos y yo creo que en toda la iglesia mundial no solo aquí como jerarquía que es donde se toman las decisiones etcétera, pero también a nivel de todas las iglesias del mundo, porque es que también la iglesia es tan grande, tan enorme una entidad tan milenaria y tan grande que es difícil gobernarla. Mira, ese es un tema muy doloroso porque ha involucrado a compañeros míos jesuitas, porque ha afectado en muchas provincias, en Chile, en Bolivia y aquí en Colombia, por hablar de América Latina, que ha llevado a que mucha gente se haya ido de la compañía porque no resistía la presión social de decirle usted es un pedófilo cuando el tipo no era pedófilo ni había encubierto a nadie porque ese compañero suyo había sido absolutamente como si estuviera robando plata, un secreto de un artista para robarse. Pero al descubrir las cosas ha sido un golpe muy fuerte. Entonces, esto nos ha afectado a todos nosotros. Se han tomado medidas y nosotros se han tomado medidas y se siguen tomando medidas cada vez más drásticas aquí por ejemplo yo no puedo estar con un niño menor de edad si no hay un adulto presente que sea familiar de él si vamos a tener un campamento tenemos que tener la autorización de los papás y cualquiera de los que va de nuestro equipo, tiene que haber hecho una declaración de que no tiene ningún proceso de la justicia de abuso de menores, ¿sí? Si es un religioso, que ahorita tengo aquí un teólogo brasileño que está colaborando conmigo en la parroquia y que va a trabajar con la infancia misionera y la juventud eucarística, él tiene que enviarme un documento de su provincial de Brasil que diga que él no tiene ningún proceso en la justicia con respecto a abusos de menores. Y él mismo debe hacer un documento que me dice, yo, fulano de tal, declaro que no tengo ningún proceso, que no estoy acusado y que no he abusado de ningún menor. ¿Por qué se hace eso? Porque usted puede tener cara de angelito, de yo no fui, hermano, y resulta que ese era el encubridor más impresionante de abuso sexual. Eso se está haciendo. Dolorosamente sigue habiendo abuso. Entonces, cada día se van extremando las medidas de protección a los menores. Todos los jesuitas aquí en Colombia tenemos que firmar un documento en el cual digo yo que no he sido acusado. Pero como ustedes habrán visto por los casos que han salido últimamente que esos que firmaron esos papeles habían abusado ¿sí? y que probablemente sus compañeros habían sido testigos de eso sospechaban, veían cosas raras pero como que se creó un silencio cómplice que hoy está afectando a las vocaciones porque un tipo normal dice yo no voy a entrar a esa jauría de locos yo no me voy a juntar con esa mano de enfermos que está afectando a gente que abandona el sacerdocio porque no resiste la presión de su entorno familiar y de amigos, usted que hace hermano en esa entidad pedófila con casos súper comprobados como los de Bolivia que son escandalosos gente que se filmaba que tomaba fotos lo que Francisco ha hecho, como decía muy bien Kelly, es generarle a los obispos y a las comunidades religiosas la orden y la posibilidad de que estructuren y hagan las sanciones necesarias que Roma irá a justificar porque suprimir un sacerdote es un proceso canónico complicadísimo entonces si Roma no colabora pues hermano usted podría sancionar aquí en Colombia pero en Roma no iba a pasar nada entonces lo que se ha construido es una red que permita que cuando se comprueben los hechos, se produzcan las sanciones, tanto civiles como canónicas. Aquí en Colombia tenemos dolorosa historia de un compañero nuestro que ha estado preso, ya cumplió su sentencia por abuso de menores fue a la cárcel eso eso a todos nos parte el alma porque uno conocía a ese hombre haciendo su trabajo colaborando y cuando uno oye las barbaridades que hizo uno dice cómo fue posible que eso pasara. Y cómo generar sanciones para que eso pueda producirse necesitaba la participación de Roma. Y yo creo que Francisco ha aceitado la burocracia vaticana para que allá no se sigan presentando trabas que impidan tomar las sanciones correspondientes, independiente de las sanciones civiles que haya lugar según los códigos de cada país. Para Jorge Serrano, el gran legado de Francisco no van a ser sus encíclicas, sino los gestos que ha hecho y que han cambiado la imagen del Vaticano. Para muchos, Bergoglio cuando llegó era el mismo que apoyó la dictadura para otros era el tipo que apoyaba a los curas villeros y nos encontramos con un hombre de gestos cuyos documentos son radicales pero no son escandalosos son más escandalosos los gestos que él tiene que otra cosa y yo pienso que eso es lo que va a quedar en la memoria de los leyendas. Yo quería preguntarle a Kelly Velázquez qué discurso de todos los que le escuchó pronunciar al Papa Francisco a lo largo de esos años en que usted cubrió el Vaticano le impactó y le quedó en la mente. ¿Por qué no lo recuerda aquí? El discurso que hice en Bolivia es un discurso contra este sistema económico, contra el capitalismo salvaje. Es uno de los textos más fuertes y los discursos más políticos que yo creo que ha hecho el Papa durante estos 12 años de pontificado. Era impresionante porque es un discurso muy fuerte y era la Bolivia de Evo Morales delante de toda esta gente, todos esos movimientos que Evo tenía a su alrededor y era verdaderamente un discurso muy fuerte tipo social porque es ese otro tema del papa es un papa que le ha dado mucho espacio a los temas sociales a los problemas de la pobreza que otros papas pues relativamente no lo tocan pero claro, es un discurso un poco ya viejo, porque lo que pasa es que este pontificado, con un pontífice enfermo, cada vez más enfermo, pues es cada vez más débil. Esto es A Fondo. Mi nombre es María Jimena Duzán. A Fondo es un podcast producido por Mafialand. Producción general, Beatriz Acevedo. Producción de audio, Daniel Chávez Mora. Música original, del maestro Oscar Acevedo. Nos pueden escuchar también en mi canal de YouTube. Gracias por escuchar. Soy María Jimena Duzán.