Neurodiversidad desde adentro | Aline Bravo

               Hey, it's Nikayla from Side Hustle Pro. From a local business to a global corporation. Partnering with Bank of America gives your operation access to exclusive digital tools, award-winning insights, and business solutions so powerful you'll make every move matter. Visit bankofamerica.com slash banking for business to learn more. What would you like the power to do? Bank of America N.A. Copyright 2024. ¿Qué te gustaría que hiciera el poder? entrenará próximamente. Recuerden que si quieren suscribirse al boletín semanal de ideas en nuestro idioma, ver las charlas de TED en Español o seguirnos en las redes sociales, pueden hacerlo en TEDenEspanol.com. Los dejo con la charla de esta semana. ¿Cómo interactuamos con personas cuyas mentes funcionan de otra manera? Bienvenidos al podcast de TED en Español. Soy Jerry Garbulski. En su charla, Aline Bravo nos cuenta su experiencia personal en el espectro autista y nos propone una perspectiva distinta para comprenderlo y así poder construir sociedades más inclusivas. Escuchemos a Aline. Salini. Hola. Mira, a mí me gustaría aclarar un par de detalles sobre el autismo. Hay muchos conceptos erróneos y uno de ellos es que puedes ser un poquito autista. Eso no existe, no puedes ser un poquito autista o muy autista, Como una barra de sonidos, ¿no? Poco volumen o mucho volumen. El autismo me gusta pensar que es más bien como una paella. Hay muchos tipos de paella con muchos ingredientes distintos. Y siguen siendo paella. Ni una es menos paella por ser diferente a la otra. Y así es el aspecto autista. Y a lo mejor te estás preguntando ¿quién soy yo para hablar del autismo? Pues mira, yo soy Aline y soy autista. Yo fui diagnosticada formalmente de adulta, pero desde pequeña ya sabíamos que yo no era lo más normal. Y eso sorprende mucho a la gente y da un poco de respeto, ¿verdad?, decir eso, soy autista. Suena muy mal. Yo no suelo decirlo, pero cuando lo comento a la gente me suelen decir cosas como tú no pareces autista, si eres normal. Y yo no sabía que las mujeres pueden ser autistas. Pues sí, somos. Además, hay muchas otras cosas que son bastante normales. Pero cuando llevo la etiqueta de autista sorprende muchísimo a la gente. Mira, yo soy esposa, yo soy madre, soy la dueña de una yegua, soy diseñadora gráfica, sorprende muchísimo a la gente. Mira, yo soy esposa, yo soy madre, soy la dueña de una yegua, soy diseñadora gráfica, soy extranjera, y también, bueno, a lo mejor puedes que no creas, pero estoy un poquito embarazada. Y hay una cosa que yo seguro que no estoy, y eso es que yo no estoy sufriendo del autismo, aunque los medios lo suelen publicar por todos lados con estos tipos de titulares que sufrimos del autismo. No es más bien así, yo sufro de la asiática, pero no de mi autismo. Y entonces me gustaría poder empezar desde cero y desaprender esos conceptos del autismo como una enfermedad y algo tan horrendo. Me gustaría hablar más sobre la neurodiversidad. Y la neurodiversidad es un término general usado para describir condiciones que llevan a navegar procesos cognitivos y emocionales de forma distinta a la norma. O sea, básicamente una forma distinta de pensar y ver el mundo. Y eso incluye no solo el autismo, pero incluye déficit de atención y hiperactividad, incluye Tourette's, dislexia y un montón de otras condiciones. Pero todo bajo el concepto de que estas condiciones no son una enfermedad, no hay que curarlas, solo es algo normal dentro de nuestra variedad y condición de ser humanos. Yo dentro de la universidad puedo hablar del autismo, porque es algo que me toca a mí personalmente, soy autista. Pero también tengo que explicarlo que, como es tan amplio el espectro, no puedo hablar por todos los autistas. O sea, yo puedo hablar mi experiencia personal y también intentar representar un poquito nuestro colectivo. Pues mira, a mí me gusta tener las cosas claras y las definiciones reales. A mí me gusta tener las cosas claras y las definiciones reales. El autismo es un trastorno neurobiológico que afecta el sistema nervioso y el funcionamiento cerebral. Y eso también da lugar a dificultades en dos áreas en específica, que es la comunicación e interacción social. Y también en la rigidez del pensamiento y conducta. Esa definición, pues eso, es una forma distinta de ver y vivir y ver el mundo. A mí me gusta contarlo de una forma más cercana porque a lo mejor lo puedes entender de otra forma, ¿no? Por ejemplo, mi autismo. Yo tengo muchísima dificultad de leer entre líneas. Si no eres claro conmigo, yo pierdo el hilo. Por ejemplo, en la misma evaluación de mi autismo, me hicieron preguntas como ¿te sientes cómodo en una situación social? Pues yo no sé, ¿cómo? Define cómodo. ¿Cuánto de ansiedad puedo tener en esto de ser cómodo, estar cómodo? ¿Y qué tipo de interacción social? O sea, ¿hay gente, no hay gente? ¿Tengo que hablar con alguien o no? ¿Estoy en un bar? ¿Somos dos personas o tres? Si no me lo defines bien, pues ya no sé qué hacer. Otra cosa que me pasó en España fue que cuando yo llegué no entendía a nadie porque aquí solo se hablan con expresiones. Y yo tuve que apuntarlas todas en un cuaderno y buscar en Google luego todo su significado porque no lograba entender lo que decían. Y bueno, ya las llevo bastante bien, pero hay una que no me entra ni para atrás y esa es la leche. Todo es la leche. ¿Por qué la leche? O sea, ¿habéis quedado algún día en una reunión y habéis decidido que la leche es un líquido superior a los demás? Yo no entiendo. La acepto, la uso, pero es rara. Y otra cosa también que me pasa es que yo no sé leer las expresiones faciales y las situaciones. Yo nunca sé si alguien está enfadado conmigo o no. Creo que cuando sonríen es de verdad, pero no lo sé. Y muchas de las interacciones que tengo me resultan súper inconvenientes porque no solo tengo que estar hablando con la persona, pero en mi mente estoy pensando, madre mía, sonríe. No, eso es mucho diente y menos. Mírale a los ojos. No, mucho. ¿La persona está incómoda? No sé. Y aparte de eso, tengo que pensar si contesto de forma adecuada o no. Y muchas veces no es la forma adecuada, porque soy muy literal. Y entonces todos piensan que luego soy muy borde. Y no es mi intención, pero yo creo que cuando se pregunta algo, pues quieres la respuesta. Bueno, eso no es verdad. Cuando me preguntas, ¿qué tal mi proyecto? ¿Te gusta? ¿Te cae bien mi primo? Oye, ¿este vestido qué tal? ¿Me queda bien? Eso, no queréis la respuesta. Mira mi bebé recién nacido, aquí es muy guapo. Pues no, señora, todos los niños cuando nacen, la verdad que muy guapos no son. Pero hay que decirlo, ¿no? Y entonces hay que tener muchísimo cuidado. Hay muchas sutilezas cuando estamos hablando con la gente que yo no las pillo. Y entonces, pues se mira un poco mala cosa, ¿no? Mira, a los autistas en general nos pasan muchas cosas. Podemos tener sensibilidad con la luz, por ejemplo, o sensibilidad con el sonido, lo que viene a ser estímulos externos. Puede llegar a ser debilitante. Hay mucha gente que es sociable o extrovertida, como yo, y hay gente que no, que es introvertida. Normal, ¿no? Y hay una cosa que sí nos pasa mucho de nosotros, y eso es que son las estereotipias. ¿Qué es? Seguro que me habéis pillado moviendo las manos y los dedos. La definición oficial es un poco fea para mi gusto. Dice que son movimientos repetitivos sin ninguna funcionalidad. Y sí tienen. A mí lo que me resuelve la vida es poder moverme porque me quita la ansiedad, me quita el estrés. Y eso yo creo que tiene un propósito, ¿no? O sea, está bien. Pero lo suelen pensar que es algo muy inconveniente a los demás. También entiendo que no entendáis muy bien el autismo porque solo hay un estereotipo del autista, ¿no? Que viene a ser un hombre genio, alguien súper espectacular. Solo se habla de autismo en los medios, en las redes y en Hollywood, cuando es alguien como Sheldon, The Good Doctor, hasta Drax de Guardianes de las Galaxias. Y entonces, ¿qué pasa con los demás? También existimos. Yo no soy de quismiquis. A mí me gusta que se hable el autismo como sea, porque más hablamos, más se queda normalizado. Nunca fue mi intención salir aquí diciendo a todo el mundo que yo soy autista. Hola, soy autista. No, eso yo no lo quería hacer. Llevo mi vida entera ocultándolo por un motivo. Es que hay un estigma muy feo, un estigma muy malo sobre el autismo en sociedad. Es como un suicidio laboral y social, ¿no? ¿Y quién quiere salir al mundo diciendo que tienes un problema como este? Pues nadie, ¿no? Lo que pasa es que yo tengo un niño de tres años que ha sido diagnosticado con autismo. Y yo de primera mano he visto lo que ofrece la sociedad a alguien que a lo mejor no ha conseguido aprender esas capacidades sociales. Yo no sé si mi niño algún día será capaz de actuar de forma socialmente aceptable a vosotros o a los demás, al mundo. Y yo lo que quiero es que él y gente como él, como yo, tengamos un lugar donde podamos ser nosotros mismos, donde se nos acepte en sociedad. Y por eso estoy hablando. Mira, hay una señora que dice aquí en España que por su hija mata. Y esa es la primera expresión que no he tenido que buscar en Google. Y entonces quiero normalizar el autismo. Y también hablar un poco por mí misma, ya que estoy, ¿no? Siempre hablan de nosotros. Hablan los médicos, hablan las asociaciones, hablan los padres, hablan todos, hasta los profes. Pero, ¿dónde están los autistas? ¿Quién sabe más de lo que nos pasa a nosotros que nosotros mismos? Y entonces me gustaría invitar a que, si eres neurodiverso, que puedas hablar, que puedas salir del armario y te sientas cómodo hablando de lo que te pasa, de lo que es, de lo que vives. Porque yo creo que más hablamos, más será aceptado. Y mira, somos muchísima gente. Hay mucho autismo, aunque parezca que no. Los datos de CDC, que es un organismo americano, dice que uno de cada 59 niños van a ser diagnosticados con autismo. Y desde Autismo Europa, que es un órgano de la Unión Europea, dicen que es uno de cada 100. Eso es muchísima gente, mucha gente. Y seguimos siendo un grupo súper marginado de personas. Muchos niños sufren un acoso escolar alucinante porque ellos no entienden lo que está pasando en su entorno y su entorno no sabe entenderles a ellos tampoco. Y a las niñas y mujeres, eso es otro tema bastante gordo. Pero a nosotras no nos suelen diagnosticar a tiempo. No nos pillan porque tenemos un autismo distinto a los chicos. Somos más sociables, solemos aprender mejor a imitar comportamientos sociales y actuar de forma más aceptable. Y entonces eso hace con que no nos diagnostiquen a tiempo y no conseguimos tener esos apoyos tan fundamentales cuando somos pequeños. También hay otro dato que asusta bastante y ese dato es que hay un 90% de desempleo dentro del colectivo autista. Eso es mucho. Y no es porque no seamos capaces de trabajar, sino es que sabemos que las entrevistas son un concurso de popularidad. Y cuando eres rarito, no terminas de caer bien del todo. Es difícil conseguir ese trabajo, ese primer paso. Y entonces es muy importante que empecemos a hablar de ese tema también. hablar de ese tema también. Vamos a dejar claro que nosotros no estamos rotos. Funcionamos en un sistema operativo distinto. No soy un puzzle existencial a nadie. Seguro que habéis visto esta piecita de puzzle por todos lados. Está bien, pero infantiliza un montón las cosas, porque la gente se olvida que a partir de los 18 años seguimos siendo autistas, ya no somos niños con colorodorines y cositas. Y tenemos un problema real, ¿no? Hay muchas empresas ahora que están empezando a apostar por talento autista. Se han dado cuenta que tenemos una forma muy distinta de pensar y que eso tiene sus ventajas. Encontramos patrones de una forma muy fácil, solemos solucionar problemas de una forma distinta y eficaz, y entonces eso llama la atención de las empresas. Y yo digo, si las empresas privadas son capaces de abrirnos un hueco, yo creo que también nos lo pueden abrir en sociedad. Yo no quiero dar lecciones de moral a nadie, no quiero pedir a nadie nada, no voy a exigir nada de nadie, solo que a lo mejor tengáis un poquito de compasión y comprensión cuando te encuentres con el autismo o con neurodiversidad en general. Por eso si eres neurodiverso o tienes a alguien neurodiverso en tu vida, te invito a tener esas conversaciones para que podamos transformar nuestro entorno en un lugar mucho más inclusivo para todos. Gracias. Si te gusta TED en Español, la mejor manera de apoyarnos es compartiendo el podcast con tus amigos. Puedes encontrar todos los episodios en TEDenEspanol.com o donde escuches tus podcasts. Soy Jerry Garbulski y te espero en el próximo episodio. ¡Gracias!