Mi lucha como mujer en el género vallenato - invitada: Karen Lizarazo

Mi lucha como mujer en el género vallenato - invitada: Karen Lizarazo

16 de oct de 2024

En este episodio del podcast 'Vos Podés', la anfitriona charla con Karen Lizarazo, una destacada cantante del género vallenato que ha roto barreras como mujer en un sector predominantemente masculino. Karen comparte su trayectoria, los retos que ha enfrentado desde joven, y el apoyo incondicional de su familia, especialmente su padre. La conversación también aborda temas de crecimiento personal, superación y el papel de las mujeres en la música vallenta. Además, Karen reflexiona sobre experiencias de vida intensas y el impacto del machismo en su carrera.

Capítulos

Los inicios de Karen Lizarazo

Karen habla sobre su incursión en la música vallenata desde joven, mencionando cómo, a pesar de las dificultades, su determinación la llevó a perseguir su sueño contra viento y marea. Detalla la influencia que recibió de su padre caleño y su madre ocañera, abordando cómo su diversidad cultural ha impactado en su música.

Desafíos en el mundo del vallenato

Karen describe los obstáculos que ha enfrentado, especialmente por ser mujer en un género dominado por hombres. Explica cómo la música ha sido su medio para representar a otras mujeres y construir su carrera, a pesar de ser vista como una forastera en Valledupar.

Un paseo por la memoria personal

La artista rememora experiencias de su infancia y momentos cruciales de su carrera, como su primer concierto en Aguachica y los sentimientos que evocó. Habla sobre el impacto emocional al enfrentarse al machismo, el apoyo de su familia y su evolución personal.

Un proceso de sanación personal

Karen confiesa haber lidiado con ansiedad y el impacto que eventos negativos, como el acoso por parte del cantante Poncho Zuleta, han tenido en su bienestar. Detalla su camino hacia la sanación emocional y las medidas que está tomando para cuidar de su salud mental.

El rol de las mujeres en la música

Discute la importancia de las mujeres en el vallenato y cómo, a pesar de los desafíos, persiste en su misión de fortalecer la presencia femenina en el género. Comparte su admiración por figuras que han abierto puertas para otras artistas y defiende la necesidad de una unión más fuerte entre ellas.

Conclusión

El episodio culmina con un mensaje inspirador de Karen Lizarazo para todas las mujeres que enfrentan adversidades: ser auténticas y no dejar que el miedo dicte sus decisiones. A través de su historia, Karen insta a las mujeres a empoderarse y perseguir sus sueños con valentía, mostrando que es posible superar los obstáculos con determinación y apoyo de las personas correctas.

Menciones

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               Aunque muchos creyeron que no daría la talla, ella estaba lista para dar la pelea por sus sueños. Ella es Karen Lizarazo, una artista del género vallenato que con su voz y su talento está dejando huella en el folclore. Un episodio más en Vos Podés el Podcast y hoy me acompaña una súper mujer que se ha destacado por una representación increíble en la escena vallenata. Ella es Karen Lizarazo. Bienvenida. Ahora sí ya, con toda. Ahora sí estamos ya ready. Que comience la fiesta. Yo estaba así toda asustada. Yo, Dios mío bendito, que comience esto. Porque este podcast lo admiro tanto, lo admiro tanto y mi familia, que le tengo como un susto. O sea, ¿me tenés miedo aquí? No, a ti no, pero sí como a vos podés. A vos podés como tal, le tengo como su respeto. Karen, pero vos podés, vos podés. Ay, gracias. No, feliz de estar acá, mi amor. Feliz de que seas una mujer también igual que yo, que también puede y que quiere, que quiere como decimos nosotros, tú que eres caleña y yo que soy costeña, sacar la casta por representar a tantas mujeres de pronto vulnerables y que no tienen un micrófono para poder decir tantas cosas que quisieran. Y aquí estamos nosotros tratando también de como que representarlas y decirles, ustedes también pueden. Vení, pero vos tenés algo de sangre caleña. Por supuesto, mi papá, mi papá, Jürgen Celizarazo. Caleño a mucho honor y creo que ahí tengo por dentro, por mis venas corre mucho del Valle del Cauca y de Cali, ¿ve? Pero tenés algo como de caleñidad, ¿cómo te trata tu papá? ¿O no tienes acento así como pegadito? Bueno, ahorita antes de empezar la entrevista yo te decía que yo fuera feliz que mi papá se despertara todos los días y me dijera, ¿cómo amaneciste, ve? Mira, ve, muévete, muévete. ¿Vamos al gimnasio o qué? ¿Oís? Yo fuera feliz que él hablara así, pero mi papá cero. Mi papá no se le sale nada de caleño, nada de costeño, nada. Mi papá vive en Aguachica Cesar, que es donde me engendraron y me tuvieron. Y de mi pueblo hermoso, Aguachica Cesar, todavía viven ahí. Creo que vamos a vivir, pues mi papá va a vivir toda la vida ahí porque ama a Aguachica igual que yo. Mi mamá es ocañera, pero mi mamá sí habla muy ocañero. Y mi papá no habla caleño. Mi papá habla muy neutro, neutro, pero neutro. Una cuestión que tú escuchas hablar a mi papá y no sabes de qué región es. Pero cuando ya tú interactúas con él y él se pega su bailadita de salsa, los gustos musicales, el deporte, que también Cali es muy fútbol, Cali es muy deporte. Él es licenciado en educación física, ahí se le sale a mi papá todo el caleño. Además, que mi papá me ha enseñado y me ha mostrado con ser él, cómo es la gente caleña como tú y como todo el vallecaucano, que es muy amable. Son personas muy frenteras, muy sabrosas, muy entronas, pero muy respetuosas. Son personas muy humanas. Amo mucho Cali. No voy muy seguido, pero me siento caleña en parte. Tienes que conquistar esa zona con tu música. Es difícil. Los caleños son difíciles para conquistarlos con el vallenato actual. Y somos vallenateros románticos. Pero el de antes. Y yo he ido como tres veces y les digo, y sí, obviamente ganamos un terreno, pero Cali no es como tan fácil de conquistar. Cali es un público jodido, pero no jodido de mal, sino que son muy melómanos. Obviamente saben mucho de música y no les gusta cualquier cosa, entonces espero que algún día puedan creer en mí. Además que, mira que cuando yo llegué acá, la gente me preguntaba si yo tenía como familia costeño o qué, porque me gusta mucho el vallenato, conozco de vallenato, me encanta la música vallenata, porque es que en Cali, además de la salsa, bueno, el reggaetón ahorita, que los géneros urbanos, los ritmos urbanos están tan fuertes en Cali, como que crec salsa, bueno, el reggaetón ahorita, que los géneros urbanos, los ritmos urbanos están tan fuertes en Cali, como que crecimos con vallenato, y el vallenato antiguo, el vallenato, mejor dicho, suavecito, romanticón. Y sabes que Cali tiene algo, y es que cuando se enamora de un artista, lo defiende hasta el final. O sea, Cali no se enamora siempre de todo el mundo, pero cuando se enamoran, le creen, y así mismo con todos los géneros musicales, así mismo como te digo con el deporte, y aman, aman su cultura, la defienden, tienen mucho sentido de pertenencia y eso no lo tienen todas las ciudades ni todas las regiones. Y espero que también puedan creer, ¿creyeron en Patricia Terán? Sí. Espero que puedan creer algún día en Karen Lizarazo y en todas las mujeres que hacemos Vallenato. Bueno, ¿y tu mamá de dónde es? Uy, mi mamá es otra cosa, o sea, mi mamá es otra cosa diferentísima a mi papá. O sea, ellos son... Dicen que los pueblos opuestos se atraen, pero ellos son como tan iguales a veces y tan diferentes en otros momentos que siento que hicieron de mí una mujer muy... Como muy, por decirlo así, completa y también incompleta. O sea, es una cuestión rarísima. Mi mamá es... Mi papá es súper prudente. él es la mata de la prudencia. Entonces no parece caleño. Pero, o sea, prudente en cuanto a, siente que algo está mal o algo, él como que, sí, ahí como que casi no parece caleño. Ahí sí no. Bueno, pero cuando está parrandeando y no sé qué, ya él es, pero mi papá es muy prudente porque aparte es docente. Él estudió en Pamplona, entonces yo creo que ahí le tocó bajarle un poquito a ser tan frentero, él dice las cosas como son, pero lo hizo con muchísimo respeto. Mi mamá, ella sí parece más caleña, mi mamá es ocañera y los ocañeros también son muy frenteros, pero mi mamá es sin filtro, pero ella es como tan pasional y tan buena mujer, tan buena mamá, tan buena amiga, tan buena hermana, que le duele. O sea, ella se hace amiga hoy tuya y mañana te pasa algo malo a ti y dice, ¿a quién hay que matar? Vamos, porque se entrega demasiado, es demasiado pasional, es demasiado, si se puede. Esa mujer es la propia voz podés. Ella es, si se puede, no nos queda nada grande. Cuando yo estaba en el colegio, creo que se pasó también de protectora porque ella quería que me fuera bien en todo, ella quería que nadie me hiciera sentir mal, ella quería que yo no fuera la chica de pronto del colegio que la vieran como la que no puede, como la que no lo logró, como la que en el deporte no jugaba bien entonces salí buena deportista cantante, me iba bien en todo lo que era artes, en religión era la mejor, en ética y valores, en naturales y sociales. Yo era buena en todo porque mi mamá quería que yo fuera, y hoy en día te confieso que me ha afectado un poquito que mi mamá fuera tan exigente. Y hoy me afecta mucho porque estoy en un mundo, yo soy abogada, pero estoy en un mundo en donde para poner un post, lo pienso. ¿Mil veces? Es impresionante, lo corro para acá, lo corro para allá. Estoy en el estudio de grabación, grabo la voz. O sea, en vez de cantar una sola vez o dos veces, la grabo siete veces porque quiero que quede. Y eso de pronto es de esa época en donde mi mamá y mi papá me decían, tienes que ser la mejor. Y es un consejo obviamente para toda la gente que está escuchando esta entrevista. Y que vamos a hablar largo y tendido de todo, pero los papás no tienen la culpa, ¿sabes? Vienen como con unas cadenas atrás en donde de pronto también los papás de mi papá y de mi mamá querían que fueran los mejores también y ellos dijeron así mismo nuestros hijos y de pronto yo mañana tengo un hijo voy a querer que sea el mejor, pero no, yo ahí corto la cadena porque al final no hay como que el hijo pueda pueda sentirse un poquito más en libertad, mi mamá me ama tanto que siempre quiso y esta es la hora y mi mamá quiere que yo sea la mejor, mi mamá quiere que yo un concierto no me quede vacío, mi mamá se va para un concierto mío vestida toda de morado por la mancha morada de Karen Lizarazo, el color morado que es el color que te representa, si, el color de nosotros, el color morado en el vallenato ella es la presidenta del club de fans. Qué divina. Entonces, cuando me nominan a premios, ella llama a ella misma a voten por Karen, vamos a ganarnos ese premio. Ella lo hace por amor a su hija, pero yo a veces le digo como que va a mi coja la más suave porque al final del cuento todo lo tiene Dios en control. Esa es mi mamá, o cañera más, y papá es más. Mi papá es más, ve tranquilo que todo va a estar bien. Ay, me encanta ahí ese mix. Pero los dos son espectaculares. Pero es que tu proceso, además, en la música vallenata, que es a lo que te dedicas actualmente, pues no fue fácil. Primero, pues por ser mujer, está clarísimo que en el tema del vallenato pues siempre se han destacado los hombres y además de eso, porque por la zona en la que naciste, o sea, eso es Aguachica, Cesar, es como una zona del país que para los costeños no es la costa, ¿cierto? ¿Sos considerada como cachaca de alguna manera? Es un rollo, porque yo a veces le digo a mis amigos, marica, es que nosotros a veces no somos como ni fu ni fa. O sea, es una cuestión y no ni fu ni fa de mal, sino en cuanto a mis amigos, marica, es que nosotros a veces no somos como ni fu ni fa. O sea, es una cuestión y no ni fu ni fa de mal, sino en cuanto a regionalismo, en cuanto a cultura, en cuanto a... Tenemos... Pero no somos ni fu ni fa y al contrario de eso tenemos todo. Yo pienso que Aguachica, Cesar, por si hay personas que me están escuchando y son paisanos míos como esta morrocoyita que tengo yo acá. Nos dicen morrocoyeras porque es el animal representativo de mi tierra. Somos muy como la tortuguita, o sea, no somos como que queremos ya ser los mejores, pero vamos ahí, paso a paso, como tratando de hacer del pueblo una gran ciudad. Y en Aguachica hay demasiado talento, pero pasa algo, culturalmente hablando, y es que a veces nos falta un poquito de sentido de pertenencia, pero no por culpa nuestra, sino porque a nosotros nos colonizaron, por decirlo así, personas de todas partes. O sea, yo creo que hasta hace unos años, la generación nueva de Aguachica, sí son de Aguachica los papás y las mamás, pero en la generación mía, en mi combo de mis contemporáneos del año 90, 90 y algo, como hasta el 2000, los papás y las mamás de mis amigos todos eran de Ocaña, de otros lados, no eran papás de Aguachica, o sea que los que ya, digamos que mis amigos o amigas que ya van a tener sus hijos son los primeros papás que son de Aguachica que van a tener hijos de Aguachica, entonces sí se va a sentir ya como el sentido de pertenencia por el pueblo. Antes estábamos como que teniendo culturalmente algo de Norte de Santander, porque estamos a 40 minutos de Ocaña. Teníamos algo del río Magdalena, porque estamos a 15 minutos de Gamarra, entonces somos como medio ribereños. ¿La combinación ahí? Estamos a 3 horas, 2 horas y 45 de Bucaramanga. Bueno, entonces mi manager, tengo dos managers, uno se llama Rodrigo Pimienta y otra es Dani Moreno que es mi manager, personal manager, tour manager, bueno, en fin, esa persona que yo creo que le falta solamente pararse en la tarima y cantar. Bueno, ella es de Codazzi y ella me conoció y me dijo, Karen, pero tú no eres ni costeña ni cachaca. O sea, es una cuestión, aparte de todo, hasta mi manera de bromear, de echar un chiste. A veces he hecho un chiste y suena cachaco. A veces hago un comentario y suena bien costeño. O sea, cuando yo canto, yo no canto así como tan rajado, tan ajá. Pero tampoco tan cachaco. Entonces es una cuestión como neutra. Que la verdad, si tú me lo preguntas a mí me encanta ser así porque sí, primero porque es así, o sea, así nací y tampoco tengo eso de norte santandereana pero a veces sí, dependiendo de la situación saco mi norte santandereano, saco mi santandereano saco mi ribereña o saco mi costeña y siento que para mí al contrario, en vez de ser un defecto o en vez de ser algo que me reste siento que la bendición más grande que dios me pudo enviar a mi vida de mi corazón y a mi espectro musical si hablamos ya de la música porque si de pronto vas algún concierto mío algún día o tienes la oportunidad de escuchar lo que hago con la música tú vas a decir bueno pero esta pelada no hace un vallenato tan criollo si tan costeño, pero tampoco hace un vallenato tan tropipop, tan acá cachaco, sino que Karen hace una vaina que de pronto en algún momento graba con un artista popular y suena a vallenato. Tengo una amiga que me está viendo aquí mi jefe de prensa y me dice, de pronto hacemos un vallenato con Farid Ortiz, con alguien de la costa y suena sabroso. De pronto luego hacemos algo con Guzi y suena, o sea, como que me presto. Como que es muy versátil. Exacto, hay una vuelta como una Karen Lizarazo camaleónica que de hecho me encanta porque siento que represento muy bien el lugar de donde soy y hago sentir también muy orgullosa a mi familia de que a pesar de que soy abogada, escogí la música y ellos dicen, yo creo que Karen no hubiera podido mostrar lo que todos somos porque al final no soy solo yo sino mi familia, lo que somos en mi casa, lo que es tener un papá caleño, una mamá norte de Santanderiana, una hermana también morrocoyera pero unos familiares de Bucaramanga, del barrio La Cumbre, otros de Girón, una cosa y yo al fin nacer en Aguachica y poder mostrar con mi música todo lo que tiene mi hogar, todo lo que tengo yo y todo lo que tienen mis raíces. Siento que la música ha sido lo mejor que me ha pasado para poderlo mostrar Karen, pero las cosas, hablemolas como son porque al principio fue difícil, o sea ahorita ya estás en una etapa de tu carrera, donde ya tienes un reconocimiento, un recorrido ya yo te estoy echando el cuento, pero no al comienzo cállate, eso fue o sea, cuando alzaste la mano como a los 14, 15 años. No, terrible. Hola, lo mío es el bañanato. No, terrible. Todo el mundo como, ¿qué? Las piedras. Claro. Bueno, esto que te acabo de decir es después de comer todo lo que sabemos que uno se tiene que comer para poder decir, oye, ¿sabes una cosa? Todo valió la pena. Sí, cuando uno dice, ¿sabes qué? Todo valió la pena. Pero antes del todo valió la pena, uno pensaba que no valía la pena nada. O sea, nada valía la pena, esto es terrible, voy a tirar la toalla, terrible. Y aparte que yo vengo de un hogar en donde a mí nunca me faltó nada. No es como la típica historia de los cantantes que de pronto uno ve y dice, no, yo me fui a mi casa a los ocho años, yo la verdad, no sé, mi papá le fue infiel a no sé quién. O sea, como que siempre tuve las historias muy traumáticas, a veces en los deportistas, artistas, y uno dice, ¿será que para poder ser grande en el arte o algo yo tuve que haber sufrido mucho de niña? Y no. O sea, yo aquí donde estoy te puedo decir que tengo la mejor familia del mundo, nunca me faltó nadie económicamente. Gracias a Dios. No fuimos los más ricos, pero pues tampoco los más llevados. Claro. Y tampoco tuve problemas en mi casa de algo de mis papás, de infidelidades, de maltrato, ni con mi hermana, no tuve nada, o sea, fue una cosa hermosa. Lo único que te digo es que era muy obsesiva con ser muy buena en el colegio y eso me traumaba cuando niña porque dejaba de disfrutar la niñez por ser muy ñoña con todo y hoy en día soy así también, pero le he bajado, pero de resto te juro, Beba, que de resto era una cosa hermosa y cuando yo le digo a mi papá a mis 14 años le toque la habitación papi es que yo creo que yo voy a ser cantante de vallenato está esto esto que está acá le cayó así mi papá bien porque mi papá todo decir algo mi papá no es machista de que de mal sino que mi papá bien diomedista ay claro Poncho Zuleta Diomed o sea el propio los cantantes mujeriegos o sea que él decía ay ese cantante él no era mujeriego pero cuando veía Diomedes cantar se sentía el más ay voy a amanecer llego a la casa borracho y tal mi papá súper parrandero ajá mi papá caleño pero como tú dices enamorado del vallenato clásico y le sale su hija aparte no su hijo porque si de pronto le hubiera salido su hijo, hombre, Karon, no Karen, sino Karon, hubiera llegado y le hubiera dicho, papá, voy a ser acordeonero, claro, mi hijo, venga, feliz, claro, acordeonero, o voy a ser cantante, no, venga, o voy a ser futbolista, pero sale Karen, y su hija mayor le dice, a los 14 añitos, voy a ser cantante, y él, de vallenato. ¿Qué? No, y él nunca me dijo no, él me dijo, espere, espere, espere, me dijo, espere, espere, vamos, claro, ahí es donde sale la nobleza del caleño, y dice, espérate ahí, espérate un momentico, vamos a pensarlo, y él me dice, como que Dios lo iluminó en ese momento, y me la supo, me la supo cambiar, porque él nunca me dijo no, nunca me frustró nunca me cortó las alas él me la cambió y me dijo estudia una carrera que valga la pena que yo la apoyo en la música, y yo dije ay, hijo de madre, tiene mucho huevo tiene huevo porque yo sí quiero que me apoyen en la música, o sea, me toca tirarla toda del estadio en la carrera que voy a estudiar y yo le dije, listo, me voy para Bucaramanga porque quiero ser abogada. Yo quería estudiar música en la UIS. Y entonces mi papá, en esa época, mi papá se imaginaba, no, yo me imagino los músicos allá desordenados. Me imagino esa recocha. Mi papá me imaginó fumando de los bellos. Mi papá me imaginó con las raspas. No, claro, en esa época, porque hoy en día uno dice, no, no es así. Pero mi papá bien conservador me imaginó así, con una guitarra en un parque, mi papá me imaginó con una guitarra en un parque, un violín, él nunca se imaginó que la música no es eso, pero porque mi papá no tenía ni idea, mi papá solamente era parrandeado y chao. bueno y carencia graduó y música que para dar clases en un colegio de do re mi no entonces yo le dije bueno papá voy a ser abogada y papá respiro mi mamá nunca se metió en eso sabes lo más siempre me apoyó pero como que mi mamá dijo yúrgense es el que está como a cargo de esa situación intensa y tan densa también yo voy a hacerme la loca la loca mamá, yo voy a hacerme la loca. Lo que mejor sea ser. Sí, voy a hacerme la loca y voy a apoyar a la niña. Entonces mi mamá me ayudaba con los vestuarios cuando yo iba a cantar. Ella me ayudaba con los vestuarios, me ponía una faldita, me tini, tini, tini. Como mi papá no hubiera como mucha emoción, porque mi papá decía, ¿qué está pasando aquí? ¿Qué tal, tal, tal? Si esto es un hobby. La abogada. Mi papá decía, ella es la abogada, esto es un hobby. Mira dónde va el hobby. Entonces mi papá, después de ser, nunca desconfió, pero en medio, su miedo interno, nunca me lo demostró, pero yo estoy segura que él estaba cagado del sur. ¡Claro! Y, aparte, sus amigos, también bien parranderos, y él dice, ¿yo qué voy a hacer? Que la niña me la vayan a burlar en un escenario, porque él decía, él lo único que tenía en la cabeza era Patricia Terán. ¡Claro! Y él decía, Patricia... Que era como el único referente femenino. Y él decía Patricia Terán. Y mi papá ni que era seguidor de Patricia Terán por lo mismo, porque de pronto era mujer. Él decía, no, a mí una mujer no me va a emborrachar, no me va a poner a brincar en una parranda, no me va a poner a amanecer. Porque hay muchos hombres y muchas mujeres que todavía piensan así. Claro. Claro que ya venimos en un proceso en que no, pero en esa época, pues, como así que una mujer... Y salgo yo con ese cuento y mi papá empieza un proceso ya de echar para atrás el cassette y decir yo voy a tener que volverme el defensor número uno el vallenato femenino porque si mi hija va a ser cantante yo tengo que defenderla no solamente a ella sino a todas las mujeres que hacen vallenato buenísimo y empezó mi papá a ser el doliente más grande de una mujer en el vallenato que estas labores yo creo que el doliente más grande que hay. Me encanta. Y entonces pasó el tiempo, me empezó mi papá a recomendar en cuanto pueblo podía, porque él me decía, si a usted le va bien en la universidad, y me trae un 4, 4, 5, lo que te decía el colegio, si usted es buena, si a usted le va bien, yo le consigo toques, me decía así. Y bueno, mi papá hizo unas tarjetas. Ay, qué lindo. Agrupación Vallenata, Karen Lizarazo, puso su contacto, y yo le llegaba con un 4, 5 a la casa, un quiz, y mi papá se iba para Simití para Santa Rosa, cruzaba el río y él me cumplió a mí todo el tiempo, él nunca me incumplió, de hecho yo creo que le incumplí mayor a él que él a mí yo llegaba con un parcial y mi mamá enseguida Júrense, le fue súper bien ahorita en el parcial que si mi papá se iba para San Alberto en el carro o lo que sea, y le tocaba la puerta al alcalde alcalde, muchísimas veces pagó en la presentación, pensando que de pronto yo nunca me iba a enterar, pero él muchas veces le pagó a los músicos, de pronto no me pagaba a mí, o muchas veces hasta me dio algo a mí, pagaba a los músicos, pagaba todo, y me decía, ahí la contrató el alcalde, ¿no? Para que yo me sintiera segura de que yo sí podía ser una gran artista. Y empezó mi papá a enamorarse de la música más que yo. Y se volvió mi fan número uno, y esta es la hora, y él va a ser mi manager favorito. más que yo no se volvió mi fan número uno y esta es la hora y él va a ser mi manager favorito por tener mil managers pero después de dios él es mi mejor manager y nada me consiguió shows empecé a darme a conocer por toda la zona pues de aguachica sus alrededores y terminé mi carrera gloria dios de hecho me gradué con loudon me gradué súper bien yo creo que también fue la música sin ver a ver con un promedio de casi 4.7, algo casi 4.8. Y te lo juro que fue también el querer que si me iba bien, mi papá me ayudara en la música. Y no solamente mi papá, sino que yo pudiera surgir en la música. Luego mi papá se dio cuenta que esto no era un hobby y que esto era en serio. Y mi fan número uno y la persona que más respaldó mi proyecto, mi carrera y que yo hoy estoy echando este cuento es porque mi papá nunca me dejó caer en la música. ¡Qué divino! Divino eso. Contaste con suerte. Gracias a Dios. No a todos los artistas, los apoyan en la casa, es algo muy difícil. Pero vení que yo escucho tu historia y me suena muy parecida a la de Caled Morales. O sea, ¿cómo así que el papá le dice entonces medicina y él le entrega su diploma y le dice ya soy médico, bye, me voy a dedicar a cantar. Exacto. Yo fue así, fue como... Y eso que es diferente con Caled porque al menos su papá era cantante y sabía cómo era la vuelta, puede haber sido positivo o negativo, de pronto Miguel Morales, el maestro Miguel dijo, uy no, esto es una vaina muy complicada, que Caled no se meta en esto, como de pronto puede haber dicho, si le puede ir bien porque si me fue bien a mí, diría Miguel, no sé, de pronto él tuvo esa dualidad, no sé. En el caso de mi papá fue más el miedo a que yo era mujer. De pronto lo de Caled, de pronto era más porque el mundo de la música no era fácil. Pero lo de mi papá era porque yo era mujer. Y mi papá dijo, ¿no será que puede cantar mejor como pop? ¿Como balada? ¿Como salsa? ¿Pero vallenato? Mi papá dijo, no, vallenato no. Empezando que él decía, mis propios amigos le van a caer encima a mi hija, porque él dijo y Karen cómo va a hacer, uy, ay hombre, jupa Karen cómo va a ponerse en eso si es una mujer y yo creo que mi papá pensaba hasta, cómo se va a vestir porque no teníamos ni siquiera un referente la única referente era Patricia Terán pero un hombre tiene muchos referentes estoy como Rafael Orozco, como Dios me dé, voy a coger este de Silvestro voy a coger este de Peter, pero yo no tenía sino a Patricia, y Patricia salía en zapatillas y vestido, yo dije, yo Diomedes, voy a coger esto de Silvestro Voy a coger esto de Peter, pero yo no tenía sino a Patricia Y Patricia salía en zapatillas y vestido Y yo dije, yo no me voy a subir a hacer un escenario porque no soy yo Y aparte soy una pelada, soy una niña Y empezó un proceso grandísimo En el que hizo parte mi familia Y luego llegaron más personas Pasé también por el machismo en mi pueblo En mi pueblo creo que hasta hace muy poco me apoyaron Ya cuando vieron, lo que te digo, el valió la pena El todo está bien, pero al comienzo fue horrible Todo, en Valledupar me cerraron todas las puertas que tú no te imaginas por el simple hecho de ser de Aguachica y no ser de allá lo que hablábamos me decían la cachaca pues del vallenato y en el interior me decían la costeña del vallenato yo no sabía si era una cosa o la otra bueno, alguna anécdota puntual que recuerdes que haya sido muy difícil, muy complicada respecto a eso que estás contando, en tu pueblo que dijiste, muy complicada respecto a eso que estás contando en tu pueblo que dijiste, uy no, o sea, que mal momento. Bueno, en mi pueblo no me daban la oportunidad nunca de cantar en las fiestas del pueblo solamente una vez me dieron la oportunidad de cantar en una discoteca y ese fue el primer encontrón de mi familia con sus amigos porque ellos empezaron a llamar a sus amigos, vayan, vayan a la discoteca para que vayan a cantar a la niña, pero profe porque a mi papá le dicen profe, profe, pero vallenato, bueno. Entonces ellos fueron, me apoyaron, pero fue algo como muy familiar. Y nunca más me volvieron a dar la oportunidad de cantar en mi pueblo. Y yo siempre tocaba las puertas, por favor, por favor. Una vez me dieron la oportunidad de cerrar un concierto. De cerrar, no, perdón, de cantar en un concierto. Pero en esa época no es como hoy, que es tan organizado el minuto a minuto. Que los empresarios dicen, tu horario es este. En ese momento era artista que iba llegandoando artista que se va subiendo a cantar y de casualidad miguel morales cantaba a las 2 de la mañana y mi papá se fue y le dijo pues a mí no me conocía nadie mi papá tampoco en el entretenimiento y en el mundo de la música pues nada era el papá con la hija ya la canciona de seguir cantar entonces el papá con la hija, ella la canzona esa que quiere cantar, entonces, el papá que siempre busca que suban a la hija a cantar canzones, ahí viene el papá, vea, entonces, mi papá fue y le dijo, maestro Miguel, qué posibilidad hay de que a usted que la gente lo está esperando, de pronto pueda darle 20 minuticos, media horita, a mi hija, a la niña, mi mamá siempre me habla así como la niña, y yo puedo tener 70 años y mi papá la niña, entonces, de que le deje cantar 20 minuticos, ella preparó un show, yo preparé un show dos meses antes. Ay, no. Ensayé todos los días, una cosa intensísima, los músicos ¡Ya! Y yo, no, otra vez, otra vez. Entonces, mi papá le pidió el favor al maestro Miguel de que si me dejaba cantar antes de él porque si él cantaba y luego yo cerraba, pues todo el mundo se iba a ir y nadie me iba a ver. Entonces el maestro Miguel le dijo que no, porque ese era su horario, no sé qué. Y mi papá casi que le lloró. Bueno, pero son cosas, ¿no? Yo sé que el maestro Miguel hoy no haría eso conmigo tal vez, pero pues en ese momento él diría, no, es mi momento y es mi show. Y mi papá entendió, pero se volvió casi llorando. No, toca esperar. Hizo como dos horas de show. En ese momento los artistas hacían más de dos horas de concierto. Hoy en día un artista no canta más de una hora si había hasta dos tandas la cuerda y repetía y volvían ajá y el maestro cantó como dos horas y como a las cinco de la mañana cuatro y media fue que yo me subí hoy me subí habían como 30 personas nada más y eso en un estadio en 30 personas o sea que en un estadio 30 personas se ve como está esta línea nada, así una cosa. Y yo me subí y te lo juro que en mi caso este cuento de la música ha sido algo tan visceral y algo tan no sé por qué yo salí con ese cuento pero es una cuestión yo no sé para qué me tiene Dios, pero yo ese día me sentía en Viña del Mar. Yo era mi primer concierto, la primera vez que yo me subía a una tarima. Yo no sabía ni cómo era que se ponía el micrófono en el paral. no sabía para qué era el paral y si a pero qué momento y en qué momento yo suelto el micrófono piso que hago y había 30 personas y yo me sentía en el madison es cuartar y yo era y yo y mi papá así súper triste en la esquina porque yo mira pero yo lo mira y papá como papá vamos a romper y yo era así como, y papá así como, no, marica, o sea, ¿por qué? Si ahorita estaba lleno esto, yo quería que la vieran y yo. Y empezó el concierto, ¡ay! ¡Pum! Me apagaron el sonido. ¡No! Sí, yo como que, ahí en ese momento sí se me bajó a mí todo. Yo dije, y aún así no me puse triste. Mi papá salió corriendo para donde el ingeniero de sonido y dijo, ¿por qué me apagaron? No, porque ya, ya está tarde, ya. Ya está, y apagaron y ya, y esto se acabó, ya no sé qué pudo apagar. Y mi papá se fue y le rogó, y dijo, ¿por qué va a apagar? No, porque ya, ya está tarde, ya, ya está, y apagaron, y ya, y esto se acabó, ya no sé qué pudo apagar. Y mi papá se fue y le rogó, le dijo, yo le pago lo que sea, ayúdeme, préndale el sonido a la niña, préndale el sonido, déjela cantar una canción más, una, una, una, una, media, media. Ella ensayó dos meses, no le dejó cantar sino una canción, yo solo canté una. Y yo tenía preparado, pues, el show de, de, mejor dicho, del, del Congo de Oro. Yo tenía el Super Bowl preparado así Y pum, me apagaron el sonido y yo quedé así No alcanzé ni a sudar Y mi papá empezó a llover Y mi papá me dice, mami a mí Mis lágrimas se me confundían con la lluvia O sea, le bajaban las lágrimas Y él llevaba las congas Nosotros no teníamos utilero El equipo que uno hoy puede tener Yo misma llevaba los acordeones, el acordeonero me ayudaba con la huacharaca, la caja, el timbal, yo misma iba y volvía, volvía luego por una conga, ¿sabes? Mi papá llevaba la conga acá y le bajaban las lágrimas y decía, no puede ser, terrible. ¿Y qué edad tenías? Yo tenía como 16 años. Y eso fue en tu tierra. En mi tierra. Después de ese momento, yo quedé con un dolor muy grande. No quedé resentida, pero quedé como, ah. Y yo nunca más volví a cantar en aguachica como ocho años no volvía a cantar en aguachica en mi pueblo como que sentía es que no yo no yo sí de que se me volviera a pasar yo quedé con un trauma yo no tenía resentimiento mi pueblo al contrario decía hoy quiero cantarle a mi pueblo la reina yo pronto me suben a pagar el son sea, yo quedé con un trauma así como de, como si, como cuando a una persona la acosan o la agreden físicamente. Trauma. Y yo dije, no, yo me vuelvo a subir, me hacen algo, de pronto me subo y no hay gente. O sea, el trauma de que no hubiera gente, de que me apagaron el sonido, de que perdí el tiempo. Y yo no volví a cantar. Y ahí me llamaban, cuando empecé como a funcionar en la música, me llamaban los alcaldes nuevos, ¿no? Claro. Soy súper fan, no sé qué, alcalde, tengo la fecha ocupada. Lo decía, pero yo no quería ir. Claro, había dentro de vos como ese recuerdo. Un miedo, una cosa, una tristeza de ver a mi papá. O sea, yo tenía la imagen de mi papá llorando, la imagen de mi papá con la conga llorando y yo decía, no. La próxima vez que yo me suba a una escena en el Aguachica, yo quiero que mi papá llore de felicidad. ¿Y pasó ese momento? Y hay muchas personas que mi papá no tenga que cargar las congas. ¿Y ya pasó ese momento? ¿Ya pasó? Ya pasó, sí. ¿Y cómo las congas. Y ya pasó ese momento, ya lo viste. Ya pasó, sí. ¿Y cómo fue? ¿Recuerdas ese momento donde ya dijiste, ok, me voy a reconciliar con esto? Yo ese día subí a mi papá a la tarima y lo abracé y le pedí a todo el pueblo que le diera un aplauso. ¡Ay, no! ¡Qué divino! ¿Y hace cuánto fue eso? Eso fue creo que en el 2018. Se pegó ganas locas. Ok. Fue Una canción que hicimos con Eddie Herrera, se pegó, fue un éxito impresionante, creo que es el éxito más grande que yo tengo hasta el momento. Hasta el maestro Eddie Herrera dijo, voy pa' esa y se sumó. Y en ese momento yo le dije al alcalde, bueno, listo, vamos, ni siquiera cobré caro ni nada, yo quería era ir a sanar, yo quería ir a sanar. Hasta el alcalde me hubiera dicho, no hay plata, yo le dije, ahora sí voy. Porque me sentía fuertecita. No me sentía, sino me sentía, ya sentía que yo ya había sanado eso, pero necesitaba montarme en esa misma tarima a sanarlo. Y me subí, y cuando yo llegué, y dijeron, bueno, con ustedes, Karen Lizarazo, y el pueblo metió un grito, que se escuchó, creo que en todo el pueblo. O sea, un grito, una cosa. Yo vi gente vestida de morado. O sea, fue como yo acordarme de la última vez que pisé ese escenario y luego ver que no eran 30 personas, sino que había más o menos 10 mil personas al frente, que ni siquiera había más artistas en la noche, solo era yo. Y habían ido por mí y que habían niños llorando en el público por mí. Niños que de pronto en el momento que a mí me pasó lo que me pasó antes no habían nacido. Y que ahora eran fan mío. Y que yo solamente durante todo el concierto les decía a los papás, gracias a los papás que apoyan a sus hijos. Porque acá está el mío. Ay, bueno. Duro. Duro pero lindo. Qué lindo. Y bueno, pasé a mi papá ahí al frente, lo aplaudieron. Y bueno, meé a mi papá ahí al frente, lo aplaudieron Y bueno Me siento muy agradecida Porque Dios me ha permitido sanar Varias cosas Otras que no he sanado Uy, muchas, pero ya no son ni siquiera en la música Yo creo que son más como mías No sé, son Son cosas que hasta ahora me estoy dando cuenta que no he sanado es más, son cosas que hasta hoy puedo decir que me he dado cuenta que yo no sabía que tenía que sanar, en qué momento tú dices en una tarima ¿saben qué? buenas noches, estoy muy triste nunca no puedo, porque la gente va a decir, no pero como así si salud entonces, como no puedes hacer eso tampoco puedes actuar y fingir y volverte un personaje. Entonces trata en tus momentos de intimidad de hacer terapia. Entonces ya estoy yendo a terapia, gracias a Dios. No puedo decirte, sé que he visto tu podcast toda la vida desde que empezó y sé que aquí la mayoría de personas que vienen dicen, cuando yo sané. y hoy te puedo decir ando en esas hoy te puedo decir la próxima me hace por ahí en unos meses o en unos años me haces otra vez esta misma entrevista y yo te digo ¿te acuerdas que iba a sanar? ya sané y quiero recomendarle a la gente que por favor haga esto y esto y esto porque en realidad tu podcast es como muy oye verdad creo que de ver tu podcast también me animé a muchas cosas a leer a tantas cosas y entonces de pronto puedo ser la primera entrevistada que te dice, no he sanado, estoy en eso. No, y es que somos seres humanos en construcción, todo el tiempo. Pero, gracias a Dios, no te estoy diciendo hoy, no quiero sanar, estoy bien así. No, te estoy diciendo, estoy sanando porque quiero encontrar mi mejor versión y sobre todo porque quiero ser feliz. Si mañana yo me quedo, Dios no lo quiera, sin voz para cantar, me vuelvo bien fea. Tengo un accidente, Dios no lo quiere y me pone la cara así. No, cancelado. Cancelado, pero vamos a suponer que mañana. O mañana simplemente me aburrí de la música y dije no. Pero si yo estoy feliz y si yo estoy sana, yo puedo vivir toda la vida así. Pero si yo ahorita solamente estoy pensando que la música, que no sé qué, que hacer bien esto, que el empresario me dijo que esto, que vamos a romper, que vamos a no, que una cuestión y en donde si yo quito todo eso, luego digo y yo, entonces sale la Karen de adentro y dice, hola, yo estoy olvidada hace como 15 años. Entonces a esa Karen la que quiero rescatar y decirle, ven, vamos a dejar esto un poquito acá, yo quiero, ¿cómo estás? ¿Hace cuánto tiempo que no te veo? ¿Hace cuánto tiempo que no te hablo? ¿Hace cuánto tiempo que no te consiento? ¿Hace cuánto tiempo que no te veo? ¿Hace cuánto tiempo que no te hablo? ¿Hace cuánto tiempo que no te consiento? ¿Hace cuánto tiempo que no te amo? Entonces, estoy en eso y siento que a medida que... Y me siento muy feliz porque tomar esta decisión es como cuando el alcohólico va alcohólicos anónimos. Que es muy difícil. Que es muy difícil y dice, yo soy Karen Lizarazo, compañeros, y a partir de hoy no bebo. ¡Bienvenida, compañera! Porque así era mi abuelita, mi nona, que en paz es que es la que me enseñó a cantar, ella fue como 35 años alcohólicos anónimos. Y yo le mamaba gallo en la casa y le decía bienvenida compañera porque ella puede 35 años nunca más tomó y todas las noches que iba la reunión decía lo mismo como como como confirmándolo tomaba la decisión una y a veces parrandeaba con papá y le decía voy como a recaer decía porque le ponían esos boleros y esos tangos y mi y mi nona súper ella se dedicó a ella a ser feliz sin necesidad de licor, sin necesidad de nada. Entonces, yo estoy en lo mismo, estoy todos los días diciendo, soy Karen Lizalacio y a partir de hoy me amo y me sano a mí misma. Y yo estoy segura que yo empecé con eso desde que se murió mi abuelita. Ella se murió en pandemia, pero no se murió de COVID, sino de algo en la espalda porque recogía café y tenía un dolor muy fuerte en la espalda. Y desde que ella murió, yo me acuerdo tanto que a ella la enterraron, le echaron la arena, ¿no? Y yo salí corriendo por todo el cementerio, me iba y volvía, me iba y volvía, me iba y volvía, me iba y volvía, como tres veces. Y todo el mundo, ¿qué tiene Karen? ¿Qué tiene Karen? Y yo, corre, corre, corre, corre. Dime si eso es normal. ¿Ves que no es normal? Entonces, algo estaba pasando en mí, pero yo estaba como que, ¡ah! Es que estaba triste Y estaba mal por la muerte Entonces el cuerpo diciéndome Mandándome alertas de Ojo que vengo yo La ansiedad diciéndome Ojo que voy para allá Voy para encima La ansiedad Voy para esa Voy para esa Y yo no, no, no Me hice la loca Pasó la pandemia La pandemia me calmó Por decirlo así Porque todos encerrados Y malos artistas Encerradísimos Me calmó Y yo como que Lo que hice fue ponerle un pañito Bien grande de agua tibia a la ansiedad encima. Pero no la traté. Yo era para que me hubiera ido un de los psicólogos. Doctora, mire, me pasa esto o algo. Entonces ella identificar. Yo no. Yo dije, no, normal. También me pasan muchas cosas en la música. A mí las redes sociales, la gente de pronto ve en mí algo diferente y algo de pronto o muy positivo o muy negativo, porque a uno no le puede quedar bien a todo el mundo. Claro. Hablaste de tu abuela. Con ella iniciaste como todo este proceso de la música, cantabas con ella, cuéntanos un poquito de eso. No, pues mi abuela de Salgar, Antioquia. Nada más para completar la película de Salgar, Antioquia. ¡Oh, hombre! No, impresionante. Ella me enseñó a cantar boleros, rancheras, tangos. O sea, a mí me... Esa música, por eso es que yo amo la música popular. Entonces mi abuela fue prácticamente mi mamá, mi papá, todo. Y empezamos con la recocha de la música. En Aguachica, en mi pueblo, duró un mes que se iba todos los días la luz. A la misma hora. Y nosotros, pues, aburridísimos en el pueblo. En esa época no estaba ahorita tan ciudad como estaba, sino que no había casi nada por hacer. Sí. No teníamos aire, condición, o sea, nada, nada. Y entonces mi abuela empezaba a cantar. Y ella empezaba a cantar y yo empezaba a remedarla. Empezaba, y de tanto remedarla, aprendí a cantar. Y aprendí a cantar como ella. Yo creo que mi abuela a mi edad cantaba así como yo, porque yo creo que, o sea, yo cantaba igualito antes de que ella falleciera. Yo creo que en esta edad mi abuela estuviera cantando, yo creo que el mismo color de voz o algo parecido y me enseñó todo su repertorio empecé a tocar guitarra con el sueño de acompañarla a ella para que ella cantara y yo tocara y empezamos a cantar, ella me hacía voces, segunda voz muy inteligente para la música y luego me confesó que ella tenía un grupo de boleros, tangos y de música popular con sus hermanos pero que la vida los separó a todos todos cogieron su camino y yo quería conocerlos y ahora que falleció pues los hermanos como que aparecieron y entonces uno era músico darío gómez oa te imaginas de todos músicos tenían el alma música se llenaba claro por ahí viene la vuelta y viene si ahorita que estabas mencionando el momento en que despediste a tu abuela que estabas como corriendo de en que despediste a tu abuela, que estabas como corriendo de un lado a otro, no sé qué, y luego se lo relacionabas como el detonante, la ansiedad, más bien como el inicio de eso. ¿Sientes que quizá lo que disparó todo esto fue la pérdida de tu abuela? Sí, yo creo. La noche que mi nona murió, yo lloré toda la noche y no sabía por qué. Yo te hablo mucho de Daniy es porque nosotras decidimos que hasta que no lo logremos no vamos a descansar o sea fue una cosa como de a veces pero a veces nos preguntan pero dónde está danista karen donde está caray tiene que ser danny sea una cuestión y sus papás los papás de Dani, la familia de Dani se la pasan con nosotros. Y mi familia con ella y es una cuestión de que todos estamos empujando el mismo barco. Porque los papás de ella no sabían, ni su familia no sabían que esto de la música era tan complicado. Entonces esa noche que murió mi nona, pues yo estaba en Codazzi porque de hecho Dani me dijo vamos a pasar Semana Santa a Codazzi. Porque como que nos turnábamos o a veces ella viaja a Los Ángeles, yo me quedo acá, o sea, como que estamos todo el tiempo por ahí. Pero cuando tenemos la oportunidad nos invitamos al pueblo. Entonces ella me invita a Codazzi, yo le invito a Huachica como para volvernos a nutrir de sí. Y entonces ella me dijo, vamos a Codazzi a pasar Semana Santa porque en Huachica está feo el COVID. Porque en Huachica estaba, o sea, mis papás no se están poniendo tapabocas, nada. Entonces nosotros vamos a Codazzi mientras allá se portan bien en Aguachica y vamos y murió mi nona un domingo de Ramos apenas iba a empezar Semana Santa falleció mi nona, obviamente me puse mis tapabocas y nos devolvimos como locas en el carro para Aguachica y ella me acompañó ella manejó, yo duré, yo no paré de llorar desde Codazzi hasta Aguachica era una cosa impresionante, yo le escribí unas palabras, yo le canté, o sea fue algo muy traumático. Y Dani era... Ella decía, Dios mío, ¿yo qué voy a hacer? Porque yo creo que ella ya se olía de... Ay, Karen no es muy normalita. Y ella ya con estas cosas... A mí casi no me pasan ese tipo de cosas de los familiares que fallecen y eso. Y a mí me da muy duro que se muera alguien que yo no conozco ahora imagínate a alguien cercano y ella y ella lo sabe dani lo sabe entonces ella decía yo no voy a decir ni eso es una cosa que yo no me imagino que está sintiendo carente yo llegué allá y desde que yo llegué yo era la pierna así y a mí me hacía los brazos la van y mi tía mi tía me acuerdo tanto mi tía de ni la mamá y mam, le decía a mi mamá, Karen está rara. O sea, le decían como, Karen, ¿por qué está así? Está como muy nerviosa. O sea, todos estábamos tristes, pero yo estaba ahora con unos nervios y una cuestión que yo no podía coger el celular, yo era así. O sea, era una cosa muy extraña. Yo sé que el amor que yo le tengo y le tenía a mi nona era muy grande, pero yo sé que era el mismo de mi hermana, era el mismo de mi papá, de su hijo. Y mi papá, tranquilo. Pero es que claro, todos manifestamos claro, pero mi manifestación era porque venía otra vaina atrás, y también o sea, se me juntó, y esa fue la primera vez que yo sentí ese tipo de nervios, que hoy ya yo lo manejo, pero yo no lo había sentido antes de ese día no había sentido, ni siquiera cuando me iba a montar en una tarima en el Prudential Center de New Jersey ante 40 mil personas o sea, no, yo no sentía ni que era ese tipo de era un vacío acá, un hueco, que yo decía, yo tengo un hueco yo me miraba, yo tengo un hueco y yo llegué a no pudo ir nadie después al entierro por el COVID y eso, y yo me acuerdo que esa noche, yo lloraba lloraba, lloraba, lloraba, lloraba, y yo le decía a mis papás ¿dónde está mi hermana? y entonces me decían, mi hermana ya tiene dos sobrinitas, o sea, dos hijas, mis dos sobrinas y ya tiene su esposo, y mi hermana se tiene dos sobrinitas, o sea, dos hijas, mis dos sobrinas, y ya tiene su esposo. Y mi hermana se fue a dormir esa noche a la casa de Sergio, que es mi cuñado, que es también de Aguachica, y que se fueron a dormir allá como para turnarnos. Y yo, hasta que mi hermana no me dijo que iba para la casa y que yo la viera, que estaba bien, yo no podía dormir. Mi papá, como si yo fuera una bebé, me llevaron al cuarto de ellos a dormir en medio de los dos. Y yo era toda, me decían que yo era toda la noche así. Y Dani decía, esto está raro. Porque, sí. Entonces yo lloré, lloré, lloré. Y tenía muchos sueños raros. Lloré, lloré. Al otro día, lloré todo el día. Yo estaba hablando contigo y me servían el desayuno. Llorando, desayunando, llorando, almorzando. Yo me acostaba a dormir, me bañaba, llore, llore, llore, pero una cosa impresionante y se me pasó como a los ocho días, compramos un perrito, y me empecé como a entretener con el perrito, entonces el perrito me la mía y se me, como que yo, encariñaste. Sí, me encariñé y como que, entonces, ¿qué hice? Otro paño de agua tibia encima de la ansiedad, la puse. Y después, lo de los tatuajes. Después, hace poco fui a Silvestre Dangón. Tuve la oportunidad y la enorme bendición de que me invitaran acá a Bogotá al Campín a cantar con él. Te vi, ahí te vi. ¿Tú estabas ahí? Sí, te vi. ¿Qué tal? Sí, espectacular. Ese día tenía ansiedad. Sí. Me cayó la punta del celular en el ojo. Ay. Pero escúchame las cosas que me pasan. Es una cosa rarísima. Yo estaba cambiando, me daba ¡pam! Pero durísimo que yo dije, perdí el ojo. Uy, qué dolor. Pero impresionante. Y yo, Dios mío, Dios mío. Y Daniela cambiándome, porque ella es la que me viste, ella es la que me ayuda. Te voy a agradecer. Decía que ya vienes en un proceso. Ya vienes calmada. Te voy a agradecer que esto no vaya a ser otro detonante para ti no no no cómo se te ocurre cómo se te ocurre yo voy a ver borroso por ese ojo pero yo no nos dimos cuenta pero yo no estaba viendo borroso era yo la yo mi cabeza así como se te creativa para la música soy creativa para cualquier otra cosa yo mal yo yo yo yo se lo hace así pero me da la sensación de que te das muy duro me doy du Me doy duro, por eso te estoy diciendo que tengo que sanar, me doy durísimo, yo pierdo un amigo, yo tengo un amigo en mi banda, de mis músicos, así de mi alma, y se va para otro lado, es como si yo hubiera terminado con mi marido. Mala, tusa, o sea, dime si eso es normal, eso no es normal. Muchas personas dirán, ay sí, pues va, uno lo extraña, uno, no, no, porque eso pasa a ser toxicidad, eso pasa a ser un un apego ansioso, eso pasa a ser una vaina que no está bien, entonces yo antes de llegar allá, yo dije, que el 2024 sea un motivo para que yo en el 2025 pueda decir, Dios, estoy mejor, y no cuando esté bien ya 50 años que yo diga, ya no tengo, ya no voy a echar para atrás, ya me quedé así. Hace un rato hablábamos de Dani y mencionaste tres palabras, dijiste ansiedad, dijiste depresión, mencionaste también lo del pánico, has experimentado, ya hablaste mucho de la ansiedad, has experimentado como otros acontecimientos. Estoy ahí, no quiero pasar de ahí, porque solamente Dani me ha explicado lo que significa pasar a las otras. Y ella me dijo, o sea, yo la admiro mucho, a, yo la admiro mucho a ella y admiro mucho a todas las personas que pasan por esto y hoy pueden decir, mírame. Y yo digo, wow, porque si yo voy en la primera o voy en alguna de las tres y espero bajarle y poder, no puedo creer, yo no me imagino llegando al pánico, o sea, yo no puedo. Daniela me echaba unos cuentos de que, marica, yo no podía pasarte la puerta de la casa. O marica, yo estaba en un carro, en un trancón, y me tocaba parar y llamar a mi hermana y que mi hermana llegara de donde estuviera a donde yo estaba en el trancón y se montara en el carro para yo poder seguir manejando. Bueno, Daniela me va a matar con todo esto que yo te estoy contando. Toca que la llames y la entrevistes a ella. Sharon, yo te paso el contacto porque la entrevista tiene que continuar con Daniela aquí sentada, pero yo te cuento esto es más porque yo, así como he aprendido de este podcast viéndolo en YouTube, así yo creo que muchas personas que vean a Karen Lizara es una persona que la ven fuerte en la tarima. ¡La patrona del vallenato! Y mira la patrona del vallenato. Todas las cosas queallenato todas las cosas que vive todas las cosas que sufre y obviamente eso no quiere decir que yo esté fingiendo cuando me subo un escenario cuando me subo un escenario es una patrona o sea soy y en poder a todas las viejas y en poder a los manes y en poder o que pucha pero así también yo creo que este tipo de espacios contigo son para desnudar un poquito el alma desnudar tu realidad para tu realidad. Para mostrar mi realidad y decir... Tu humanidad. Y decir, no estoy loca, no estoy enferma, porque no es una enfermedad, es una condición y es un proceso, soy un ser humano. No estoy que mañana voy a tirar la toalla y no voy a hacer más música, al contrario, quiero mejorarme y sanarme para cada vez hacer mejor música, para cada vez subirme al escenario más feliz. Pero sí quiero como que mucha gente pueda ver esta entrevista. Mi hermana ahorita que me llamó antes de la entrevista me dejó un mensaje y me dijo habla la verdad y con el corazón ay saludos a tu hermana vamos a hablar porque ella de pronto y cuando me dijo eso yo dije oye verdad yo a nadie nunca le he contado mi verdad qué bonito que sea aquí y déjame decirte que es la primera vez que estoy hablando de mi verdad de verdad verdad, de verdad, porque normalmente en las entrevistas uno dice, no, pues mira, mi nueva canción se llama tal y quiero recomendársela a toda la gente que está, y dice así, pero al final nunca le preguntan, oye Karen, lo que tú me estás diciendo, oye, ¿y tú qué? Y si supieras que eso es lo que más le interesa a la gente, porque además idealizamos a los artistas, los vemos por allá atrepados en una tarima, en una red social, no sé qué, y a veces no descubrimos que son igual que nosotros. Sí, y mira que, ¿tú crees que eso que me contó Dani, que me ha contado tanta gente, no me lo cuentan por echarme miedo? No, no, no. Y no me lo cuentan para decirme, me lo cuentan para que yo no lo sufra y que yo a tiempo trate de buscarle una solución a mi vida antes de que, como me dice ella y me dicen varios, marica, antes que te toque vivir lo que me tocó vivir a mí, que ya no lo estoy viviendo, que en otro momento lo puedo vivir otra vez, pero que ya lo supere, y hoy te lo hablo desde la sanidad, hoy te lo hablo desde otro lado del charco, no te lo hablo desde allá hundiéndome en el agua, te hablo desde aquí ya seca, que ya pasé, y yo no quiero que seas tú luego la que yo esté aquí seca y yo te vaya hundiendo, y yo como voy te saco, si eso es tan individual ¿verdad? porque tú sufriste de eso, y luego yo sufro, y vienes a ayudarme y lo más seguro es que yo te haga a ti volver a eso porque vuelvo y te despierto entonces ella y todas las personas que conviven con personas que están pasando por este proceso son unos valientes porque lo más seguro es que una persona arrastra a la otra entonces, te agradezco aquí desde este podcast, Dani, a ti a todas las personas que también han aconsejado mi vida, gracias porque creo que me han hecho fuerte para hoy poder decirle a muchas personas que de pronto no me conocen, o que me conocen y piensan que soy tan fuerte como en un escenario o en una entrevista de música o en una foto así de bafiche, voy para San Pablo del Sur de Bolívar, que puedan decir, si Karen está así, ahora yo, muchas veces yo digo, si le pasó esto a Karol G, ahora que no me pase a mí. Yo a veces digo así porque una vez idealiza a esa gente como tan feliz, y uno dice, eso le pasó a Shakira, ¿no? O sea, uno dice, hay muchas personas que dirán, marica, si le pasó eso a Karen, pues, vamos para adelante. Entonces, quiero que sepan que no es que me sí me entiendo. Hay muchas personas que dirán, marica, si le pasó eso a Karen, pues vamos pa'lante. Entonces, quiero que sepan que no es que me vaya a pasar toda la vida, sino que lo estoy viviendo y que sé que me va a ser una mejor persona y que sé que agradezco en el alma por esas experiencias de pánico y esas cosas que me ha contado para yo poder decir, yo todavía estoy a tiempo de no llegar hasta allá. Y qué bonito que esa persona hoy me diga, tienes todo para ser feliz. Y ella también me dice, y yo también lo voy a hacer. Claro. Pero no permitas nunca que tu salud mental sea negociable con nada ni con nadie. O sea, ni con una persona que llegue a tu vida, ni con tu música. Si va a llegar un momento de tu vida donde tu música te está afectando demasiado tu salud mental, chao música, porque primero está tu salud mental, si va a llegar otra persona tóxica, pero que cosa tan rica como está de uy, no, no, no, y como me quiere, y uno empieza, y esa toxicidad te empieza a volver tóxico a ti, entonces tú dices pero porque ella no me llama, pero que ahora son, pero dala y entonces ya te vuelves tú peor, y entonces empieza a afectar, ¿no? Entonces tú dices, pero ¿por qué ya no me llama? ¿Por qué ahora son? Pero dala, y entonces ya te vuelves tú peor y entonces empieza a afectar tu salud mental. Entonces tú dices, bebé, puedes estar de lo mejor, pero cuando esto se acabe, la que va a resultar jodida soy yo, porque yo tengo estos antecedentes o yo estoy pasando este proceso o si yo no tenía nada de ansiedad y estaba bien, entonces tú me la vas a causar. Entonces dejemos así, como dicen por ahí, y más bien tratar uno de rodearse de personas así como te digo como como lo está haciendo mi familia como está haciendo actualmente mi banda como está haciendo actualmente mi manager rocky que también me he pasado por muchos managers no te hablaba mucho de él pero él fue manager de guzzi y es una persona que llegó en estos momentos a mi vida a darme paz porque yo había tenido otros managers que pronto me daban una cosa a la otra a ti pero, tí, tí, pero no me daban paz. Este hombre me da muchas cosas también, hablando de la industria del entretenimiento, pero me da esa paz, que yo lo llamo y digo, Ruki, qué pena contigo, discúlpame, es que hoy no me siento muy bien. Karen, primero tú. Yo he llamado a otro manager a decirle, no me siento muy bien, pero no sé qué vamos a hacer porque esto está encima y esto toca mirar. Entonces... Y obviamente toda esta gente que te estoy contando Que está siendo parte de mi tranquilidad y mi paz Y Dani que es como la cereza del pastel actual Que es la que me dice Primero tú, segundo tú, después tú Y después miramos el resto que hacemos Me encanta Mira que me gusta mucho y te agradezco También esto cuando mencionas De abrir tu corazón Porque claro, uno siempre se pone como esas máscaras por eso yo tenía miedo con esa entrevista pero por qué porque yo sabía que yo me iba a destapar pero eso es lindo, como seamos la humanidad y yo te quiero mencionar una temporada, más bien un acontecimiento y te voy a mencionar a una persona y es Poncho Zuleta porque ese tema te lo voy a hablar aquí como es Contextualicemos primero a la gente Porque seguramente pues no todo el mundo Está enterado, ni de tu vida Ni de toda la situación Y fue que estuviste en un concierto ¿En qué temporada? Eso fue en Montería, en el cumpleaños De un muy amigo mío que es empresario Que se llama Freddy Erazo Y te voy a ahorrar la palabra porque la voy a decir yo, fuiste acosada por Poncho Zuleta. Ese es el nombre de la situación y por eso me pongo de escudera tuya para ahorrarte ese dolor de cabeza, porque entiendo lo que pasa en el mundo del vallenato, pero es súper importante que las mujeres nos pongamos pues como la bandera de defender también nuestros derechos y de decir, a mí no me importa si tú eres el rey de música que hay detrás, el reconocimiento que tienes con la forma en que te comportas. Y en este caso hubo una situación de acoso además pública en la que te sentiste también muy vulnerada y te viste y te pude ver y toda la gente que te sigue te vio así, viste y te pude ver y toda la gente que te sigue te vio así, pero además te sentí indefensa, te sentí en una posición incómoda que también seguramente para hablar es muy complejo, pero me gustaría hoy, ya después de mucho tiemposo yo que esa es como la enfermedad del futuro. Sí. Que es la ansiedad. Yo no hablaba de, yo esa palabra ni la decía, ansiedad, yo decía no. Es más, yo pensaba que ansiedad era a veces cuando uno dice, tengo ansiedad de comer algo, tengo ansiedad. Yo pensaba que ansiedad era así. Sí, sí, sí. Que tengo como nervios, como ansiedad, como, ay, no sé, es que voy a montar a la tarima, tengo ansiedad. No. Son ansiedad, esos son nervios, esos son... Sí. Y lo que pasó con Poncho a mí también me causó un detonante. Pero, pues, yo no tenía por qué ponerme a decir eso porque aparte ya hoy lo hablo con tranquilidad porque entendí después de mucho tiempo que tener ansiedad no es estar enfermo. Entendí después de mucho tiempo que tener ansiedad no es estar mal. Que tener ansiedad... Bueno, sí es estar mal, pero no es ser malo, de mucho tiempo que tener ansiedad no es estar mal. Bueno, sí es estar mal, pero no es ser malo. Mejor dicho. Tener ansiedad no es ser raro y diferente a los demás. Tener ansiedad, depresión o pánico no es ser ¡Ay, marica, este man esta vida ahora llegó! No. Yo pienso que pasar por el proceso de ansiedad y superarlo es volverse una persona demasiado especial en este mundo y en esta vida Y pues me tocó a mí Como sé que yo creo que a todo el mundo le va a tocar Y el que no le toque es porque no se ha dado cuenta Pero cuando Pasó la de mi abuela El segundo detonante que tuve fue lo de Poncho Y de aquí para adelante, pero lo de Poncho Fue algo que Sí me hizo sentir Que yo necesitaba ir a... Yo empecé a ir a la psicóloga cuando me pasó eso. Cuando lo de mi abuela no fui a la psicóloga, yo dije, no, eso es porque me hace falta. Extraño mucho a mi abuela, fue una muerte, pues es algo traumático. Pero cuando fui a ese evento y eso me sucedió... ¿El concierto era tuyo o el concierto era de él? No, eso fue en Montería, en los cumpleaños de un empresario. Yo nunca voy a cumpleaños de nada que tenga que ver con un concierto o algo, porque yo sé que eso a veces se presta para... Aquí llegó Karen, nada más cantó dos canciones, pero ahí no me estaban contratando, yo fui de invitada. Entonces mejor para quedar mal, mejor no ir. Entonces yo no sé por qué. Yo me acuerdo tanto, Shannon, te acuerdas, estábamos en los premios Nuestra Tierra. Fueron los premios Nuestra Tierra y al otro día madrugué al aeropuerto, ahí me fui a Montería, le compré un perfume, me fui, iba con Dani, íbamos en los premios de Nuestra Tierra fueron los premios de Nuestra Tierra y al otro día madrugué al aeropuerto a irme para Montería le compré un perfume me fui, iba con Dani íbamos las dos para arriba y para abajo como siempre nos fuimos para Montería y Dani dijo comprémosle un perfume y yo le hice si comprémosle un perfume dijo Karen es la primera vez que vamos después de siete años que estamos trabajando es la primera vez que vamos a un cumpleaños de un empresario la primera vez que aceptamos pero yo estaba tan feliz como me fue en los premios de Nuestra Tierra porque ese día fue hermoso, la pasamos súper bien, que yo dije, ahí vamos hasta a celebrar. Y yo le dije, vamos pues, nos fuimos para Montería. Llegamos a Montería, todo súper bien, Dani me alistó, nos fuimos, no íbamos modo artista, íbamos modo... Invitadas. Íbamos modo Dani y Karen, dos amigas que van a ir a donde un amigo a celebrar el cumpleaños. Nos fuimos, llegamos, hola Freya. Ya yo sentí la gente como que ya estaba entonadita y yo estaba atrasada de apenas haber llegado fuimos, llegamos, ¡Hola, Freya! Ya yo sentí la gente como que ya estaba entonadita, y yo estaba atrasada, ya apenas había llegado. Y entonces llegamos, ¡pum! Llegó el maestro Poncho. Llegó Poncho, nos saludamos, me acuerdo tanto que me estaba diciendo, no, debo dar un consejo, pero de una manera hermosa, o sea, te voy a decir que un tipazo, como yo me imagino que él es, porque una cosa, una persona de pronto saca de pronto cosas que no van cuando está con alcohol, con sustancias X, pero un tipazo que yo ahora entiendo por qué a él lo quieren tanto en el folclore, porque él, en sus cinco sentidos, es una cosa espectacular. le voy a lanzar un disco maestro y él me dijo cuente, me acuerdo tanto que me dijo, cuente con no sé cuánta plata para ese disco, la voy a apoyar y yo la acompaño en Valledupar a Olímpica a hacer gira de medios, yo, ay, ¿en serio? pues como en Valledupar a mí casi no me apoyan, de pronto en el gremio, y yo me siento como tan desamparada en cuanto al gremio, no el público el público me quiere mucho, no al gremio, a Llenato entonces yo dije, no, pues si yo voy a hacer gira de medios con el maestro Poncho, pues vamos, entonces yo todo estaba subiendo, nos hicimos llaves, amigos bailamos, él tiene una manera de bailar como muy y yo hasta me preste yo dije es que él es así y porque lo he visto bailando así con mucha gente yo creo que no es así conmigo es que él es así y empecé a bailarle él me apretaba yo decía bueno esto fue sobre la tarima no esto fue antes entonces también me miraba como ok sienta te ven y siéntate y era, tú sabes cómo es Dani, y Dani, ven y siéntate. Y yo estaba, espérate, que es el maestro Poncho, uh, estamos bailando. Y Dani, siéntate ya, porque ya no se está viendo como tan bien. Entonces el maestro Poncho le dice a Daniela, mañana sacan este bailao mío con Karen y sacan todo esto que estamos haciendo acá en las redes sociales y van a decir que yo soy un viejo verde, dice él. Y yo le dije maestro, ¿cómo se le ocurre? ¿cuál viejo verde? si estamos acá compartiendo como amigos, y Dani dice, pero mejor sentémonos, y nos sentamos me dijo que no comiera nunca antes de cantar porque eso da reflujo, hablamos de muchas cosas, pasó así, empezamos a tomar, yo casi no estaba tomando, Dani tampoco él sí pues estaba tomando, bueno el manager me dijo que el maestro se sentía como enfermo que él ya no estaba igual en las tarimas, bueno llegó el momento del maestro Poncho cantar. Y desde que empezó a cantar, me empezó a dar saludos. Pues yo me imagino que porque estábamos compartiendo. Karen, no sé qué, te quiero mucho. Ayjada, no sé qué, tal maestro. Y yo me iba para allá y le daba un trago. Yo me iba, me acercaba como que él me ha saludado y yo le llevaba un trago. Entonces, tomaba el trago, yo me devolvía. El manager también. ¿Quieres cantar una canción con Poncho? Yo, no, me da pena, me da pena. ¿Cómo se te ocurre ese vozarrón del maestro? Yo me voy a montar. No no monta te monta te pasó así él terminó la presentación pero no cantamos luego se montó el churro díaz y el churro si me invito a cantar y yo no pues yo me monto y cuando me monté a cantar con el churro el maestro se montó sí y ahí fue que pasó lo que pasó ella ahí fue donde yo sentí por primera vez no sé si a ti te ha pasado pero las personas que de pronto escuchen esto van a decir, sí, a mí me ha pasado. Cuando a mí me pasó eso... Que el te empieza a abrazar y como a intentar besarte, además. Sí, eso pasó. Eso se ve largo, ¿no? Eso se ve largo. Ese video se ve que... Pero para mí eso pasó en un segundo. Ok. ¿Me entiendes? O sea, todo eso que pasó, el sufrimiento que yo sentí en ese momento, ¡pum, ya! Pero luego, yo el video ese no lo he podido ver yo ese video no lo he visto no soy capaz de verlo, pero pues el video es largo, hay mil cosas ahí y yo digo, en ese momento yo no pensaba ni siquiera mal de él yo no pensaba mal de nadie, yo estaba sintiendo como, ¿qué hago? para yo no quedar mal ante una persona que es mi papá musical y es tan respetada en el folclore y que no se vaya a ver que yo lo agredí lo maltraté lo rechacé lo que no se va que mañana a mí no vaya el folclore vallenato a decirme te odiamos eres lo peor el maestro solo quiso ser cariñoso con algo así en ese momento pensé como no debía pensar pero no sé si me entiendas solamente que dicen por ahí que quien lo vive que no goza y yo estaba ahí allá estaba damián que en ese momento era mi manager con danny estaba mi manager con danny que mi personal manager y estaban los dos cruzando los dedos diciendo virgen del carmen que hacemos enseñar hacemos que hacemos que hacemos que ellos no sabían qué hacer, porque ellos sí se estaban dando cuenta de lo que se estaba viendo. Yo estaba en la tarima y yo no sabía que se estaba viendo. Yo solamente estaba como tratando de que eso... Yo estaba tratando de que entráramos en razón los dos, o él entrara en razón y dijéramos, ¡ay, no! ¡Uy, un abrazo! Y vamos. O que eso pasara y siguiéramos cantando y nada pasó. Tampoco sabemos que estaban grabando. Yo, por ejemplo, en la tarima estaba sana de todo, yo no. Y él, de pronto, en medio de sus tragos, hasta pensó que no estaba pasando nada tampoco y él no se estaba tampoco viendo que era lo que todo el mundo abajo era como... Como que en ese momento todo el mundo dejó de tomar, dejó de bailar. Todo el mundo quedó como mirando como que, uy, se puso pesado este momento. O sea, la gente sintió un ambiente pesado pero la gente no hacía nada. hacía nada de hecho daniela y damián sobre todo daniela tú la tienes que conocer como te digo ella es tú la conoces ella es súper si ella una vez se montó una tarima y le metió una cachetada un animador que me dijo que yo le debía plata y me hizo sentir como una ladrona y una mala paga delante de mucha gente, y se sentó y dijo a Karen y a nuestro proyecto lo respeta, y le metió una cachetada a un animador, sabiendo que un hombre que pudo haber, y se devolvió y dijo, Dios mío, ese hombre se va a devolver, y se fue. Es muy, defiende mucho, no hizo nada. O sea, así sería, entonces no hicieron nada, estaban todos así, y yo en ese momento sentí como si yo me hubiera vuelto una doble persona. O sea, como si yo me estuviera viendo desde el frente. Yo me estuviera viendo desde el frente. Yo me estuviera viendo desde el frente y yo en ese momento dije, yo voy a hacer lo que cualquier persona haría porque yo no quiero un problema más grande para mi vida y a mí nunca me ha pasado esto. Actuaste con miedo. Demasiado. Es cuando yo me volteo y le digo al maestro que me dé un pico. Porque de pronto eso era lo que el maestro quería. Sí. Y yo me volteé, antes de eso me volteé a ver como al equipo de trabajo de él. Claro. Había muchos equipos de trabajo porque había muchos cantantes. Entonces estaba el manager de uno, el manager del otro. Y yo me volteo y veo a uno que yo conozco, que no te voy a decir el nombre, pero que vive en Valle de Upari, según era amigo mío. Sí. Y yo me volteo con cara de, marica, ven. ¿Qué hago? Y él me dice, dale el besito. Él me dice, dale el besito y ya, y te vas. Sí. Y yo le volteo con cara de, marica, ven, ¿qué hago? Y él me dice, dale el besito. Él me dice, dale el besito y ya, y te vas. Sí. Y yo le hago caso. Y yo digo, oye, ¿verdad? Entonces yo le digo que me doy el beso y me voy. Cuando yo hago eso, eso fue todo lo que pasó. Yo me fui a dormir. Yo nunca me fui a dormir pensando, Dios mío, mira lo que acaba de pasar. No, yo me fui a dormir. Pero tú te sentiste a gusto. ¿Cómo? No, obviamente no me sentí a gusto. Solamente que en ese momento yo solo pensaba en, yo voy a hacer una acá claro ya cuando yo al otro ya me despierto veces escándalo siete y media la mañana y era una locura donde yo digo bueno la verdad sí pero no sé qué hacer la verdad sí pero no sé qué hacer y pues cualquier persona era reaccionado tú una vaina lo que no sabemos no sé pero pero pero yo me hago cuenta y de hecho yo entré eso fue una cosa que yo entré a buscar vídeos entre a buscar cosas de otras personas de pronto que les haya pasado algo así parecido con algún cantante con alguna y todas reaccionan igual yo sentía que era como un patrón de comportamiento al pasar por eso yo te lo juro que no tengo nada en contra de poncho yo no tengo nada en contra de su familia, me parecen unas personas espectaculares, pero a veces hay sustancias o hay momentos, hay cosas que te sacan de ti ogros o sacan de ti por decirlo así, demonios, entre comillas, que uno tiene allá adentro, como uno que a veces toma y uno dice, dice, marica, yo no puedo tomar porque tiro la chancleta. O sea, yo peleo con el que sea. Hay personas que les sale más bien ese tipo de cosas y como hay hombres que a veces toman y les empiezan a gustar los el que sea hay personas que les sale más bien ese tipo de cosas y como hay hombres que a veces toman y les empiezan a gustar los hombres hay mujeres que son cosas que tienen adentro que con los tragos les hace y él de pronto ese es su ese es su su ese es su su vuelta y yo y yo y yo la verdad es que nunca de hecho desde ese día yo nunca he tenido la oportunidad de hablar con él, de hecho tampoco he querido. Lo único que sé es que después de ese día de tanta contaminación de redes sociales y de tantas feministas, porque las entiendo, de hecho yoiosos, pero soy una fiel defensora del gremio femenino por sororidad y por todo, de una manera o sea, con mis pelas no se me metan, y creo que todas salieron a defenderme, y a mí me dio hasta pena porque yo dije, yo sé que ellas quieren que yo actúe de una manera más, yo no quiero ser tibia pero yo lo que quiero que ellas entiendan es que yo no sé qué hacer, o sea, yo no sé qué hacer y yo preferí guardar silencio, de hecho saqué un comunicado que yo después dije, ¿yo para qué saqué ese comunicado si no dije nada? O sea, yo sí, o sea, no sé qué hacer y yo preferí guardar silencio de hecho saque un comunicado que yo después dije yo para que se comunica si no dije nada o sea yo sí o sea una cuestión y luego dije y aún así me llamaron a amenazarme aún así me llamaron de bayern para decirme si le pasa algo al maestro poncho te matamos así yo decía pero yo decía si yo no estoy haciendo nada aparte que yo no le hice nada si nos ponemos a hablar a pensar la vuelta y como fue yo yo fui la que menos hice yo no hice nada digamos que él tampoco quiso hacer nada pronto fueron los tragos yo no estoy culpando a nadie aparte no estoy saliendo a hablar mal de nadie como muchas personas quisieran aparte no estoy haciendo nada en contra de él como muchas personas que vieron el vídeo quisieran yo no voy a hacer nada y aún así me están me están dañando mi paz, aún así me están haciendo que yo me vuelva loca, y eso también creo que hace parte de todo el cúmulo de cosas que hoy en día hacen, de hecho a mí me entrevistaron hace poco en, ¿te acuerdas Micharon? Me entrevistaron hace poco en Buendía, Colombia, y yo toda la entrevista duré llorando, estaba en mi punto de ansiedad más grande, estaba en esos momentos recién mis pastillas, recién todo, y ahí me decía la periodista, me hablaba de lo de Poncho, y yo le decía, no me preguntes eso, no me preguntes eso, porque eso hace parte de mis puntos débiles de la ansiedad, y de pronto Poncho y su familia y nada, tienen la culpa, porque yo sé que yo tengo muchas cosas también que hacen parte de mi ansiedad, pero esa ha sido una de las cosas más grandes que hizo que yo fuera por primera vez a terapia, que yo fuera por primera vez al psiquiatra y que yo por primera vez dijera, yo me quiero sanar porque hoy me pasó esto con Poncho y mañana me puede pasar algo peor y yo necesito estar preparada y saber cómo reaccionar y cómo actuar para todo lo que pase aquí en adelante porque pues yo quiero ser un artista grande y una persona entre más grande es, más cosas terribles le pasan. Entonces por eso estoy en este proceso. Karen, ¿qué sentiste hablando de sororidad y que eres una defensora de las mujeres? ¿Qué sentiste cuando el equipo de trabajo tuyo y tu grupo no hizo eso que tú harías? Nadie salió en tu defensa. Yo no estaba con mi equipo de trabajo, solo estaba con Dani y con Damián. O los hombres que estaban atrás. Terrible. Eso sí te lo confieso hoy. Ninguno estaba borracho. Porque para decir que es que es, manica, yo me quería parar, pero la misma peda no me dio, no. O sea, que yo haya volteado a mirar a alguien, ayúdame, y que me diga, haz lo que él quiere. Fatal. Sí, claro. Y esa persona, por ejemplo, que te estoy diciendo, de mi vida, chao, o sea, hace una cosa, y se lo dije a Daniela y a Damián cuando bajé, porque era amigo de los tres. Le dije, mira, así como es él, son todos, y me enojé muchísimo con, de hecho, hasta con Dani, me enojé a Damián cuando bajé, porque era amigo de los tres. Le dije, mira, así como es él, son todos. Y me enojé muchísimo con, de hecho, hasta con Dani. Me enojé con Damián, pero Daniela me decía, así como te sentiste tú, así estábamos Damián y yo. No sabemos qué hacer. O sea, nosotros nos montamos a la tercera cosa. Empezando que Daniela dijo, el que se tenía que montar era Damián, tal vez, porque era el hombre, maestro, ¿qué pasa? Pero yo como mujer, Karen, yo me subo allá a defenderte, hasta caemos las dos en la vuelta Porque, o sea, hasta las dos quedamos encerradas En una cosa de que Marica, o sea Yo la verdad es que A mí me preguntan por eso que paso Y yo no sé explicar Yo no sé cómo explicar Cómo estaba yo en ese momento Te voy a interrumpir, Karen Te voy a interrumpir para sacarte De esa situación compleja Porque te entiendo Y no justamente porque me haya pasado algo así, gracias a Dios, pero en este espacio he tenido la oportunidad de conversar no solo aquí, sino también en pre-entrevistas. La gente sabe que esto es un proceso para llegar acá y anticipadamente hablo con muchas mujeres que se han visto en tu misma situación. preocupadamente hablo con muchas mujeres que se han visto en tu misma situación. Y lo que decías, el común denominador es quedarse petrificadas. Y aquí hemos tenido mujeres víctimas de abuso, de acoso, de temas sexuales súper agresivos y realmente el común denominador es no sabía qué hacer. No es como uno desde afuera que dice, pero ¿por qué no corriste? Pero ¿por qué no hiciste? Pero ¿por qué? No, no, no. O sea, eso lo dice uno desde afuera. Cuando uno porque no corriste, pero porque no hiciste no, no, no, o sea, eso lo dice uno desde afuera cuando uno no está siendo víctima de estos depredadores, pero cuando uno está ahí en tu posición insisto, no me ha pasado pero lo que me han dicho estas mujeres es, quedó congelada tuvimos aquí una mujer entrevistada que fue abusada por un miembro de su familia y me decía Tati, es que yo me quedo congelada, o sea, como frozen, como que no tengo cómo reaccionar. Los músculos se le tensionan y realmente como que el cerebro no procesa esa información. Y te lo juro que tú le preguntas a ella el otro día, ¿qué pensaste? Y uno dice, ¿yo por qué no hice esto? ¿Y yo por qué no hice esto? Pero en el momento uno no piensa nada. Claro, porque en este caso eres la víctima. ¿Qué es lo triste de toda esta situación y por qué saco el caso aquí a conversación? Porque son situaciones que no se nos pueden volver paisaje, Karen, no se nos pueden volver paisaje. Cuando uno esté viendo a una mujer que está siendo víctima de acoso, del que sea, a veces tendemos a normalizar, pero es que no la besó, pero es que no le tocó los genitales, pero es que no fue más allá. Es suficiente con estar en la posición en la que estuviste, que es un acoso, porque fuiste víctima de acoso, y ya con eso es suficiente para que uno como espectador actúe. Y hay que actuar. En estos casos hay que retirar a la persona. Y te entiendo muchísimo porque te veo en este momento. ¿Cómo puedes estar disminuida? Iniciamos la entrevista con una Karen súper animada, súper sonriente, y aquí te veo ya disminuida porque también hay un miedo, que tampoco te voy a poner a hablar de eso, lo puedo hablar yo sin problema, y es el género, y es el tema de, ok, pero es que es un maestro, pero es que es las familias, en todos los entornos, con un jefe, con personas que están en situaciones de poder. Entonces, cuando es tu jefe, cuando es la persona que tiene señor puedo llegar hay algo en lo que yo soy fiel creyente y es que por más que tú te quites, si eso es para ti, a ti te llega si tú estás destinada a ser la mujer número uno en el vallenato, con o sin esta situación de por medio, tú vas a llegar desafortunadamente nos meten ese miedo y las mujeres estamos muy sujetas a eso y muy víctimas de eso de, Dios mío, pero yo yo qué voy a hacer? ¿Cómo voy a hacer quedar mal a esta persona? Tanto así que en tu discurso lo mencionaste varias veces y lo quisiste hacer quedar muy bien, lo cual habla muy bien de ti. quiera tapar el sol con un dedo, esto se vio, esto fue público, ¿cierto? Pero mira que todo eso es ese miedo, es ese miedo que te envuelve a ti y que envuelve a esas mujeres que están siendo víctimas de un acoso, de una situación así, dicen, ¿qué va a pasar con mi carrera? ¿qué va a pasar con mi profesión? Pero es que si el que me acosó es un tipo reconocido, es un tipo con el que yo puedo llegar, hay muchas maneras de llegar y aprovecho para salir en tu defensa Karen, porque si has sido víctima de amenazas y demás estas vainas tienen que parar, puede ser el maestro, el director, el jefe el, mejor dicho, la cabeza esto tiene que parar, no podemos seguir siendo víctimas de depredadores a todo momento y porque están en un lugar de privilegio, dejarlo pasar. Porque esto tiene consecuencias. Lo mencionaste. Esto fue un detonante para ti. Esto fue un detonante. Y sé que de aquí de pronto vas a salir, ¿será que dije lo que no, lo correcto en este podcast? ¿Será que de pronto lo voy a hacer quedar mal? No. Yo la verdad, la verdad, sí, sí, sí te confieso que fue un gran detonante. Creo que, creo que ni siquiera los tatuajes, ¿sabes? Yo creo que los tatuajes fue una excusa, una excusa visual. Los tatuajes fue una excusa visual de no quererme ver al espejo, pero en realidad de pronto yo no me quería ver al espejo, era por un grado muy bajo de autoestima que yo venía pasando, de pronto de otras cosas, de pronto por inseguridad, y no eran los tatuajes, sino que yo me enfoqué en eso, pero no era eso, mi mente quería que yo me convenciera de que era eso, que yo quería quitarme algo que me había hecho en mi cuerpo que no estaba bien, pero en realidad, ¿por qué yo no me quería ver al espejo? Si yo todos los días me sentía linda, todos los días me sentía fuerte, empoderada y yo ya no quería. Y yo luego empecé a entender que lo de Poncho, otras cosas que puede que ya ni me acuerde, tantas cosas calaron en mí. Pero obviamente ese caso hizo que yo empezara a sentir indicios de depresión en primer mes. en el primer mes y ya luego como que la depresión no quiso entrar en mí como era y lo que detonó fue ansiedad y si a todas las personas que están viendo este podcast solamente quiero decirles que que no les dé miedo se queda porque da y más cuando eres figura pública y más cuando en fin pero pero si ustedes están con esa malicia o con esa de oler de que algo puede pasar O de que tal persona de pronto no está teniendo el comportamiento adecuado con ustedes por alguna situación Es mejor actuar a tiempo a después quedar petrificadas Como de pronto muchas podemos quedar en muchos momentos de nuestra vida Cuando yo estaba muy chiquitica, robaron la casa donde yo vivía Y los ladrones, yo estaba muy chiquitica, robaron la casa donde yo vivía. Y los ladrones, yo estaba muy chiquitica, yo me acuerdo, tenía como 8 años. Y los ladrones me pusieron a mí encima una cobija, dos cobijas. Y dijeron, ahora te vamos a violar a la empleada que estaba conmigo. Que era una chica como de 17 años. ¡Qué susto! Yo hice de todo, malabares, me revolcaba, claro, ellos como yo era una niña, ellos me tenían como protegida, como ella no, ella no le hagan nada, y yo hice de todo hasta que alcanzó a llegar mi mamá porque estaba mi mamá en la droguería con mi hermanita de brazos comprando unos pañales, y estaba lloviendo, se fue la luz, y yo hice de todo porque en ese momento me di cuenta que donde yo hubiera permitido siendo una niña que ellos le hubieran hecho algo a esa otra niña, yo nunca me lo iba a perdonar en mi le hubieran hecho algo a esa otra niña, porque también era una niña, yo nunca me lo iba a perdonar en mi vida. Y creo que a partir de ese momento yo me volví en la defensora número uno de la mujer. Y creo que por eso también mi música es defendiendo siempre a las chicas. Hay hombres que a veces en las canciones de vallenato, de lo que sea que hacen, maltratan mucho a la mujer. Y yo no estoy de acuerdo con eso. Yo creo que yo más que artista de la música vallenata por querer tener algún día fama, reconocimiento, lujos, yo estoy como con un reto personal de querer defender el nombre de la mujer costeña, cachaca, de la mujer colombiana, y esto que me pasó con Poncho, yo siento en parte que yo les quedé mal a las mujeres, si me lo preguntas, yo me siento como apenada, porque de pronto... Para nada, tú eras la víctima. Sí, pero de pronto yo no yo no salía a hablar como debía hablar tal vez o a decirle a todas, esto es lo que hay que hacer o algo así, solamente que yo me llené tanto de miedo y que todavía yo creo que lo tengo todavía digo como que, pero y me da pena a veces aconsejar y decir actúen, háganlo, porque van a decir y tú, tú? ¿Ves? Pero te lo juro que a todas las que en el momento queden congeladas y no sepan qué hacer, a todas las entienden. Pues esperemos que sí, esperemos que le quede claro a él sobre todo, porque no es primera vez que lo hace, lo ha hecho con otras mujeres que también se quedan calladas, y pues aprovecho para dejarle un mensaje al maestro Poncho, a quien no conozco, las mujeres se respetan. A él y a todos los hombres. Y los hombres también se respetan. Tenemos que respetarnos. Bueno, Karen, acá tengo una cajita misteriosa. Esto te lo envía Lili Pink, porque Lili Pink sabe que tu historia es tu superpoder. Tenemos una pregunta, léela y nos das la respuesta. ¡Ay, Dios mío! Te tengo miedo, Tati Uy, imagínate ¿Qué dice? ¿Qué consejo le darías A una mujer joven que empieza su camino? Uy, mejor dicho Que agarre duro No, imagínate, pues Digamos que no es de la música específicamente, cualquier camino. Les voy a contar algo. Yo soy una persona muy orgullosa de haber nacido en un pueblo. O sea, yo pienso que es la mejor niñez del mundo haber nacido en un pueblo, haber tenido unos papás como los que tuve. Y a pesar de que cuando comencé nadie creyó en mí, muchas veces me gritaban los hombres que se baje esa vieja de ahí, que cante un macho y tantas cosas. Y hoy yo sé que esas personas que me gritaban eso dicen, este hijo de madre lo logró o este hijo de madre lo está logrando, qué berraca. También de pronto cuando iba a Valledupar me decían como que, oye, tienes talento pero lástima que no naciste acá en la zona donde es el vallenato. Tú eres allá, cachaca. También otra cosa que yo dije, guau. Luego también muchas personas me han insinuado que, me insinúan todavía que debo ser mucho más sexy, mucho más, mostrar un poco más de mis atributos como mujer para que yo de pronto pueda funcionar más en la música. A mí me ha pasado de todo, amiga. Y yo digo, pero pues yo quiero ser yo. El ser yo el día que me nazca salir una pantaleta salgo porque quise porque me sentí linda pero no porque me funciona para likes me funciona para reproducir y el de que quiera salir a envuelta en una sábana que no quiero mostrar ni una uña pues no quise mostrar nada y siento que mi consejo más grande es que amiga y y le hablo a las mujeres, porque obviamente los hombres también, pero sobre todo a mis peladas, que son las de aquí de mi alma, sea usted. Karen, ¿cómo ves la música vallenata, sobre todo en el tema de las mujeres? Bueno, yo lo veo bien, solamente que siento que los mismos equipos de trabajo de cada artista no están dejando que haya una unión verdadera. No sé, yo como te digo, yo como tengo un combo aparte, mi combo es todo santandereano. Ok. O sea, todos mis músicos son cachacos. Son cachacos y aparte el que no es cachaco, pues un chico de Valledupar que piensa distinto a lo que de pronto sucede allá, normalmente no quiere decir que lo que estén haciendo allá esté mal, pero yo como pienso distinto, yo me visto distinto, yo me monto un escenario de manera distinta. Yo, por ejemplo, ayer estuve en el Parque Simón Bolívar en un concierto y yo desde el portero hasta el señor que estaba en las luces en la ingeniería de sonido fui a darle las gracias, porque si el portero no hubiera estado, ¿quién nos abre la puerta? Si el señor del sonido no hubiera estado, ¿yo cómo canto si no me escuchan? Y el de las luces, ¿cómo yo me ven si no me ponen las luces? Entonces, no soy yo. Lo que yo quiero todo de pronto todas las chicas entiendan no somos nosotras somos muchas personas que nos ayudan a brillar y no brillamos sólo nosotros tú ves un escenario no es sólo una luz brillando tú ves una luz en todo el escenario y son el cajero allá diciendo quiero que mi polla como me dice mi cajero mi pollita cante bonito le va a tocar la caja bonito para que se le escuche bonita la voz y allá está el señor de la pirotecnia tirándome la candela donde es y no quemarme para que cuando yo haga ¡za! entonces salga ¡pum! la candela acá y son tantas cosas que de pronto hay muchas chicas que no son ellas de pronto sino el manager diciendo, tú eres eso eres tú, tú eres la tú eres aquí la chacha, tú eres esta y si otra mujer llega aquí a pedirte que cantes con ella es porque ella te necesita, no que tú la necesites, ella es quien te necesita porque tú eres la que chacha, tú eres esta y si otra mujer llega aquí a pedirte que cantes con ella es porque ella te necesita, no que tú la necesites ella es quien te necesita porque tú eres la que está aquí, no no porque mira el legado tan grande que nos dejó el maestro Marjeles, que en paz descanse él yo creo que fue el artista que más apoyó a una mujer en el vallenato, le entregó el éxito más grande que tiene el vallenato femenino que es tarde lo conocí a Patricia Atenas casi que le ayudó en toda su carrera luego le ayudó a toda su carrera. Luego le ayudó a Margarita Doria, que también es otra artista. Le ayudó Ana del Castillo, creo que le hizo toda el 85, 90% de la carrera de Ana. Tiene mucho que ver el maestro Wilfrán Castillo, pero sobre todo el maestro Mar Gélez. Andreina es otra artista que también le dio mucho. Yo creo que yo fui la que menos compartí con él de todas. Y aún así me aportó muchísimo Y lo que faltaba Si no que se fue de este mundo terrenal Entonces él era una persona que yo creo que le gustaba más Una mujer cantando viena tú que un hombre Porque él decía, él veía en una mujer cantando Viena tú una luz distinta Y él decía, tanto macho cantando viena tú Pero en serio, él decía, una mujer tiene Un plus como de Como que no es normal, y tú lo que no es normal te atrae entonces dice, hay que apoyarlo, o sea, porque no, es que eso no es normal, entonces no me gusta no es normal, me parece chévere, voy a ir a ver para ver qué, entonces mira como como de pronto él estaba inculcando la unión, pero hay mucho manager hay muchos músicos, muchos artistas que por ejemplo a mí me pasó cuando yo creé mi primer grupo Vallenato, yo decía, porque yo soy muy musical no como que llego a cantar y ya, bueno luego que vayamos por ejemplo a mí me pasó cuando yo creé mi primer grupo vallenato yo decía porque yo soy muy musical no como que llegó a cantar y ya bueno luego que vayamos por allá para grande arte muestra y yo soy muy como que yo oye mira me está para estar a pira y tú responde sara para tratar a tu vaya y tú acá y listo hagámoslo así viene un dos cuando yo me da la vuelta todos todas tienen que sí en serio eso pasaba yo pasé por nueve bandas y mi novena banda es esta que tengo actualmente llevo 13 años con ella y espero durar 13 mil años más eso que está haciendo hoy en día carol g yo lo pudiera soñar en el vallenato obviamente estamos hablando de pero yo lo sueño o sea lo que yo decía lo que yo decía ahorita Si estás soñando una cosa Que cualquiera te escucha y te dice Ay, ya lo vi Sí, lo estoy soñando Y puede que, si tú no sueñas así Si tú sueñas así de grande Puede que te llegue algo un poquito más pequeño Pero al menos así Pero si tú sueñas así O sea, no, tienes que soñar así grandote Para que al menos lo que te llegue sea más o menos así Entonces yo sueño grandísimo Y espero que algún día yo te pueda invitar a un estadio a un concierto mío. Ay, ya anotadísimas, anotadísimas. Va. ¿Cuál es ese mensaje final para no solamente tu mancha morada, sino todas esas mujeres que de pronto hoy te están escuchando por primera vez y dicen, ve, me gustó esta pelada, voy a darle play, ve. Voy a seguir la historia. Allá en Cali, allá en Cali. Bueno, mira, esta que era lo que canta. Y esto que no cantamos, en otra próxima entrevista cantamos. Pero hoy estamos más hablando desde el cora. Estamos en modo típico hoy. Hoy estamos típico y bajo. Bueno, mi mensaje, uf, son tantos. Cuando mucha gente te diga que estás haciendo algo malo, es porque vas súper bien. Ese es mi mensaje. Creo que es el mensaje que me representa. Obvio, te he dicho muchas cosas, te he contado mil experiencias, te pudiera contar mil más, pero cuando las personas te digan, ay, a mí no me gusta esa mujer, es muy brincona. Y cuando canta en la tarima es como toda, ay, no sé qué. Amiga, por ahí es, por ahí es porque si no lo estuvieras haciendo así, ni estuvieran hablando nada. A la gente cuando, a la gente cuando no le importa algo, ni siquiera dice, hey, bacano, no dice nada. La gente ni habla. Sí, ese podcast vos podés, es una cosa ahí que es con una, va súper bien porque si no ni estuvieran nombrando el podcast. Mira que ahorita que llamé a mi hermana por videollamar, lo primero que me dijo fue, soy fan. Y mi hermana, que no es digital, mi hermana tiene Instagram de mierda. O sea, mi hermana no tiene... Tiene WhatsApp porque tiene que hablar con la gente, pero mi hermana... Y si es fan de tu podcast, es porque de verdad está llegando a donde tiene que llegar. Y mi mensaje es, sea natural, pero sin pasar por encima de nadie. ¿No crees que yo soy así? Yo soy natural, yo soy orgánica, yo soy una persona como soy. Pero pasando por encima de la gente, entonces estás siendo mala soy así yo soy natural, yo soy orgánica, yo soy una persona como soy, pero pasando por encima de la gente entonces estás siendo mala persona, sé buena persona sé natural, como eres, no te dé pena si cantas vallenato pero se te sale el santandereano, bueno, canta tu vallenato santandereano, si eres de Tunja y te gusta el vallenato, hágale, porque es que el vallenato no es Valledupar ni es La Guajira nada más es Colombia y es el mundo y simplemente cuando tengas la ilusión de hacer algo que te apasione, no veas referentes iguales o menores a ti. Ve referentes grandes y sueña con ser así. Yo me la paso viendo a Selena y yo digo, no, pues yo nunca voy a ser Selena, pero yo la veo. Y algo se me pega de ahí y algo saco de ahí. ¿De qué me sirve a mí volverme zapatera y voy a ver al señor zapatero de la esquina que tiene zapatos más feos que los que yo estoy arreglando? Vaya usted y vea en YouTube o donde sea el mejor zapatero de la esquina que tiene zapatos más feos que lo que yo estoy arreglando vaya usted y vea en youtube donde sea el mejor zapatero del mundo que está haciendo no que ahora no pone el pie sino que ahora es un spa y mientras está reventando le van haciendo masajes atrás entonces invéntese algo sea diferente y no le dé miedo el reto no le dé miedo ser distinta porque ahí es donde está el gol de la vida, y bueno, nada que los quiero mucho ay que divina Karen, gracias por estar aquí saludos a toda esa mancha morada por favor mi gente de Cali, a sintonizar esta mujer búsquenla ya, Karen Lizarazo, vallenato pero espectacular, te lo estoy diciendo yo, haceme caso ahora hablemoslo en caleño y digamos bebe, vos podés. ¿Oís? Soy Tatiana Franco y esto es Vos Podés, el podcast. Vos podés, el podcast.