A Fondo analiza las implicaciones que tiene para el país el atentando contra el senador de la oposición Miguel Uribe

A Fondo analiza las implicaciones que tiene para el país el atentando contra el senador de la oposición Miguel Uribe

10 de jun de 2025

En este episodio se aborda la preocupante situación de violencia política en Colombia, reflejada en el reciente ataque al precandidato Miguel Uribe, lo que revive recuerdos de los violentos años 80 y 90 en el país. Además, se discute el impacto de las redes sociales y los discursos de odio en la polarización política actual. César Caballero, experto en encuestas, es invitado a analizar estos fenómenos y su influencia en el clima político y social.

Capítulos

Violencia política y recuerdos del pasado

El episodio inicia comentando el reciente ataque contra Miguel Uribe, reviviendo el recuerdo de la violencia política de las décadas de 1980 y 1990 en Colombia, años en que varios candidatos fueron asesinados, como Luis Carlos Galán.

El impacto de las redes sociales en la política

César Caballero analiza el papel de las redes sociales en la propagación de discursos de odio, señalando que una minoría muy activa impulsa estos discursos, mientras que la mayoría de usuarios consume pasivamente sin interactuar.

Polarización y discurso de odio

Se discute cómo tanto la izquierda como la derecha, incluidos los medios de comunicación y los individuos, han contribuido a un clima de polarización y discurso de odio que exacerbó el ataque reciente y que podría influir negativamente en las próximas elecciones.

Medios de comunicación y responsabilidad

Los medios de comunicación son señalados como parte del problema, debido a la tiranía del click que privilegia contenido polarizante. Se hace un llamado a los periodistas y medios para reflexionar sobre su papel en la moderación del discurso público.

La importancia del proceso democrático

Se resalta la necesidad de preservar la tradición democrática en Colombia, promoviendo elecciones libres de violencia, y la urgencia de tomar medidas para garantizar la seguridad de los candidatos en el actual clima de polarización.

Conclusión

El episodio concluye con un llamado a la moderación del lenguaje político y mediático, y a la protección de la democracia en Colombia, especialmente en un contexto donde la violencia política ha vuelto a mostrar su cara. César Caballero destacó la importancia de no subestimar el impacto de una minoría activa en las redes sociales y la necesidad de proponer acciones para desescalar la polarización actual.

Menciones

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               de las imágenes dantescas de lo que sucedió el sábado a las cinco de la tarde, cuando un joven le disparó por detrás a el precandidato del Centro Democrático, Miguel Uribe. Las imágenes nos devolvieron a todos los que más o menos tenemos edad de merecer, por decir otra cosa, a la época asiaga de los 80 y de los 90, cuando casi que fueron desaparecidos por cuenta de la violencia, varios de los candidatos más importantes que iban a tener que formar parte de la baraja electoral de las elecciones de los 90. Incluso muchos de ellos fueron asesinados antes, como pasó con Luis Carlos Galán en 1989. Pero esos nombres que pasaron y pasaron por nuestras mentes, Jaime Pardo Leal, Bernardo Jaramillo, José Antequera, Ernesto Samper y Pizarro, nada menos, que era también el candidato del M-19 que salía de la guerra y entraba a la legalidad. que salía de la guerra y entraba a la legalidad. Todas estas imágenes nos removieron toda suerte de sensaciones. Y uno no puede sino decir primero que desde aquí expresamos nuestra solidarazo a la violencia como un medio de acción, de acción política. La violencia no puede ser la manera como nosotros tenemos que dirimir nuestras diferencias. porque como dice una propaganda por ahí de una campaña oficial, la estigmatización mata. Y la verdad es que en Colombia la estigmatización y la polarización ha venido siempre empaquetada en la política y fue la derecha, digámoslo, la verdad la que la empaquetó primero. Y ahora desde la izquierda, Gustavo Petro también está recurriendo al discurso de odio. Pero, ojo, los medios también. Los individuos también. Usted también. Por eso hemos querido invitar a César Caballero, que es el hombre que lee las encuestas, encuestas, que mide lo que nosotros no podemos medir diariamente y que ha trabajado mucho el tema de las redes, porque yo sí creo que influyen y tienen un espacio cada vez más grande, a pesar de que sean unas burbujas. Bienvenido aquí. María Gemena, muchas gracias. Es un gusto estar contigo. Vengo con tristeza, creo que es la tristeza que todos sentimos. Yo a Miguel lo conozco, le tengo aprecio, tenemos una lectura del país de eso, quiero contarte esto. Nosotros hicimos este año cerca de 10 mil encuestas en 21 departamentos, en los municipios que tienen más de 50 mil habitantes. Es un montón de gente. Y hay una de las cosas que encontramos es que la red X, que es donde yo me muevo, una de las cuales en las cuales tú te mueves y donde mucha gente se mueve, solo el 10% de los colombianos mayores de 18 años tienen esa red. Increíble. Y de esos, el 30% estamos en Bogotá. Y de esos, la mitad estamos en cinco localidades. Es decir, esto es una burbujita, pero de un tamaño tan... O sea, no nos sentamos tan importantes en eso y particularmente reconozcamos que en esa burbujita hay cosas y hay voces que lo que se escucha podemos nosotros intentar aplacarlo. Y voy a terminar con un estudio que no es mío, es un estudio internacional que dice que en redes digitales está la regla del 90-9-1. ¿Cuál es esa regla? Es el 90% que está en las redes no hace nada, solamente consume. El 9% interactúa y normalmente son los más radicales. ¿El 9%? Solo el 9%. Y solo el 1% lidera. O sea que, en el fondo, el discurso de odio está animado por una minoría. Menos del 10%. Porque no es ni siquiera todos los que... Entonces, el 90% de la gente, yo conozco mucha gente que lo único que hace es entrar, mirar, pero no dan un like, no interactúan. Ese es el 90% de la gente. Claro, eso es lo que deberíamos hacer muchos. Miren, miren, pero de pronto miren más cuando van a hacer un like o un retulteo. Y termino con esto, Mariana. En un estudio, ahora en la Feria del Libro, se publica un libro con la Universidad del Rosario. El profesor Carlos Charri lo editó. Y ahí hay un artículo que tuvo que pasar, un artículo académico mío, que tuvo que pasar por la lectura de pares y este tipo de cosas. En el artículo, que yo no lo recordaba, pero ahora que estamos acá, yo ahí afirmo que cuando nosotros hicimos tres experimentos en donde hacemos encuestas a hogares, a personas, y hacemos un ejercicio digital, y miramos si hay diferencias entre quienes responden digitalmente y quienes no. Y la diferencia sí es que en el mundo digital, el grueso de las respuestas son de jóvenes, de los dos extremos ideológicamente, y son más hombres que mujeres. O sea, son un poco más. Los hombres. Sí, entonces bogotanos, hombres, jóvenes y radicales. Ese es el 9%. ¿Y ese 9% cómo se sitúa a nivel ideológico? Los que más parecieran escucharse son como un 20-25% de izquierda, un 30-30 y pico por ciento de derecha, y los otros sí están en el centro. Pero un poco lo que quiero señalar es, este país no está polarizado, este país está fragmentado, lo que pasa es que solo escuchamos las voces incendiarias, lo que pasa es que solo escuchamos las voces incendiarias, solo escuchamos las voces radicales, solo escuchamos las voces extremas. Pero las demás voces, las voces razonables, razonadas, por la manera como funcionan los algoritmos, no son, no generan, digamos, interacciones. Porque usted ve una posición y dice, ah, sí, una persona razonable. Entonces, los aburridos somos más. No, claro, porque es que los... y ni siquiera son, pues, digamos... Los no radicales. No, en eso es cierto, pero eso es muy, muy cierto lo que usted está diciendo. El peso y la importancia de los algoritmos, que yo creo que también es otro debate que se tiene que dar. La propagación del discurso de odio tiene que ver con la perfilación de datos. Eso es una especie como de cocina que se hace, una receta que se hace por allá como la Coca-Cola. Y entonces cogen los datos, perfilan los gustos, la ideología que uno tiene, las percepciones políticas, las sociales, y empiezan a bombardearlo con noticias que exaltan cualquier cosa que uno tenga en el corazón, será. Y a punto de percepciones van cambiando, van cambiando y van manejando esa percepción. El premio Nobel que hablaban de que los seres humanos pensamos como en dos carriles, uno que reacciona inmediatamente y uno que es racional. Uno de los autores es Coleman, el de Fast de Think Fast. Las redes y el algoritmo lo que está desaprovechando es el primer motor de reacción de los seres humanos, que es más emocional, que le gustan las cosas de humor, que le gusta... que reacciona ante críticas. Pero el otro, que también tenemos todos los seres humanos, pues se vuelve una cosa más tranquila, más reposada. Y déjeme le cuento, María Gemena, yo durante un tiempo hice una campaña, durante los dos o tres años, de reunirme con gente que me atacaba, que me agredía, que de alguna manera me decía cosas agresivas. ¿Y cómo fue? La experiencia es que en todos los casos son buenas personas, son seres humanos razonables. me decía cosas agresivas. ¿Y cómo fue? La experiencia es que en todos los casos son buenas personas, son seres humanos razonables, pero que detrás de la pantalla se vuelven unos seres que se sienten con la autorización de agredir a los otros seres humanos. Es decir, ninguno de ellos después de que tuvimos el encuentro me volvió a agredir. Hemos tenido discrepancias, normal, pero un poco es como detrás de la pantalla hay unos seres humanos que se sienten con la condición de poder decirle a otro ser humano cosas que nunca le dirían de frente. De las cuales serían más razonables. De hecho, con todos ellos y a principios de este año había un par de ellos. ¿Cómo hizo para contactar? No, no. Pues los contacté y le ellos, y hace, a principios de este año, vi a un par de ellos, o principios o finales, peleando. ¿Cómo hizo para contactar? No, no, pues los contacté y les dije, oiga, tomemos un café, o almorcemos. Y pues me senté con ellos, con personas, pues obviamente, aquellos que me habían amenazado, pues no, pero digamos, radicales. Y hoy, en estos días, vi a unos, más recientemente, que se estaban diciendo las cosas más absurdas y a ambos les, o sea, yo no quise o sea, porque cada cual decide lo que haga pero tanto el hombre como la mujer estaban agrediéndose, yo decía y tenía yo el recuerdo de estar sentado con él y con ella y decía, pero este es un muy buen tipo ella es una muy buena mujer o sea, pero ¿por qué se están haciendo esto? porque se sienten con la licencia de agredir al otro cuando están en la pantalla y yo creo que todos deberíamos empezar a antes que criticar lo que hacen los otros reflexionar un poco en la invitación que tú hiciste al principio porque claro, criticar está bien yo creo que la crítica es importante pero también pensemos lo que nosotros estamos haciendo tenemos una corresponsabilidad pero vamos a eso y quiero contarte una experiencia que tuve porque tiene que ver con incluso sentarse con el agresor. El que además no solamente lo agrede a uno, sino lo amenaza. Una de las tantas amenazas que me llegaron y que terminó en la fiscalía fue hace como unos 4 o 5 años un uribista, evidentemente uribista, porque él decía, soy uribista, me dijo, sacó un trino y dijo, a María Jimena la tienen que, primero cortar la cabeza y colgar la cabeza en la plaza de Envigado. Entonces yo dije, bueno, esto ya es demasiado y yo presenté la denuncia ante la fiscalía. Acto seguido, la fiscalía hizo una operación, allanaron la casa, capturaron a la persona y dentro del proceso me pidieron un acercamiento, un acuerdo. Y no conocí al tipo, no me senté, pero hablé con el fiscal. Resulta que el tipo nunca había leído nada de lo que yo había escrito. Nunca, ni una columna. Y lo único que sabía era que yo era una guerrillera. ¿Por qué? Alguien te descalificaba. Alguien dentro de las bodegas uribistas yo era etiquetada como una guerrillera que estaba afectando la democracia. Pero él no sabía quién era yo. Nunca me había leído. Entonces, la reflexión y la pregunta es ¿cómo es que si tú has estudiado es que los algoritmos logran crear estas nuevas realidades? Porque es que lo que estamos viendo es que no solamente la estigmatización mata, cosa que ya sabemos, sino que las redes tienen una capacidad de rehacerte a ti, de construir una identidad virtual que es completamente distinta a la que tú tienes en la realidad. Déjame, voy a tomar un minuto. Hay un libro que les recomiendo de un filósofo francés, no lo pronuncio bien, o sea, yo no sé pronunciar francés, que se llama La vida espectral. Y el texto arranca recordando cómo comienza Hamlet. Y Hamlet está con sus dos o tres amigos, frente al mar, con la oscuridad. Están tristes porque su papá ha muerto. Y de pronto ven un espíritu. Y lo ven los tres. Y el espíritu empieza a llamar. Y los otros le dicen no vaya el sistema está muy loco y Hamlet decide ir y llega a una parte del bosque donde ese espectro se convierte en el fantasma de su papá que está muerto y que le dice mira es que tu hermano me mató y yo te voy a guiar diciéndote lo que debes hacer este filósofo dice hoy nosotros tomamos nuestro celular que en últimas está gobernado por unas nubes unos algoritmos como si fueran unos espectros que nos van conduciendo hacia donde debemos tomar decisiones y te recuerdo que Hamlet es una tragedia. Bueno, y yo... Recomiendo ese libro, es muy bonito. No, me parece... ¿Cómo se llama? La vida espectral. La vida espectral. Bueno, aquí vamos a meterlo en los libros que tenemos que leer aquí en el pronto. Ese libro vale la pena leer. Habíamos hablado desde el inicio de que, pues, evidentemente uno le pide al presidente, como ciudadana, como periodista, que le baje el tono. Le pide a los políticos, sobre todo derecha, que no empiecen a pescar en Río Revuelto aquí y a beneficiarse de un acto criminal. Y bajen el tono también. Pero los medios, los medios, ¿qué podemos decir de los medios? Porque yo creo que también en esto hay que hacer una autorreflexión de cuál ha sido el papel de los medios. Sí, mira, hoy nosotros publicamos hace dos semanas la quinta edición de la encuesta sobre libertad de prensa y acceso a la información, que lo hacemos con la FLIP. a la libertad de prensa y acceso a la información, que lo hacemos con la flip. Una de las mayores causas de estrés de los periodistas, nos lo contestaron 500 periodistas en Colombia, es la tiranía del click. Los periodistas nos dicen, mire, parte un poquito del tema que nos está ocurriendo a nosotros, es que nosotros estamos sometidos, por la manera como el negocio funciona, a que tenemos que escribir cosas que generen clics, que generen engagement. Es decir, los periodistas también están, los medios también están sometidos a ese tema. Entonces, y esa es la causa de mayor estrés. Lo primero que les genera mayor estrés es la instabilidad laboral. Y lo segundo es el algoritmo. Tener que estar pendiente de cómo generar mayores métricas en unas redes que realmente son unos espectros y que realmente son... Entonces, digamos, lo primero yo diría es, sí, yo creo que el señor presidente tiene que cambiar su manera de referirse a otros seres humanos. Sí, yo creo que los líderes políticos de todos los partidos tienen que aportar. Y también creo que los medios tienen que empezar a decir, aquí hay que desescalar un poquito el lenguaje. Y todos nosotros tenemos que hacerlo. Pero en medio de eso yo, viniendo para acá, consulté con una persona a quien quiero mucho y de alguna me decía, sí, es que el presidente no comenzó con eso, le dije, no, es que no, el problema no es que no haya comenzado, yo no sé si comenzó o no comenzó el problema es que si yo estoy en clase y un alumno dice una grosería eso es una cosa, pero si yo soy el profesor y la digo, es otra cosa y yo te voy a decir una cosa que el presidente de la república en el discurso donde está diciendo porque es que el discurso de la noche me parece que tuvo cosas buenas, pero tuvo cosas muy malas. Es que él dice que es que debemos desescalar, que es que debemos tratar a las personas a la vida, e inmediatamente dice que quien lo está criticando son unas ratas. Es decir... Unas ratas de alcantarilla. Yo lo veía y decía, este señor no se está escuchando. Este señor básicamente lo que está diciendo es no haciendo coincidir sus palabras con sus actos. Y esto pasó en menos de 15 segundos. Una incoherencia total, porque es que usted no puede salir y decirle en televisión, en directo a los colombianos, que tenemos que reconocer la vida del otro y la humanidad del otro y en la siguiente hora vas a decir que quien lo esté atacando a él, esté insinuando cosas, digamos, no necesariamente es una rata alcantarilla. No, no, no señor. Entonces él sí tiene una gran responsabilidad, pero todos los demás tenemos que desescalar. Y yo creo que es parte un poquito de lo que hay que hacer para entender un poquito mejor lo que está pasando, que es bastante más complejo de lo que todos creemos. Porque yo creo que una de las cosas que hay que entender claramente es que evidentemente este clima de polarización, este clima de estigmatización, que evidentemente no lo comenzó Gustavo Petro, en eso hay que aclarar, yo lo dije desde el comienzo, la estigmatización viene siendo una herramienta y un arma que se utiliza desde hace mucho tiempo en Colombia, entre otras porque así se libró, fue considerada un arma de guerra, sobre todo en la guerra contra la subversión que se hacía a punta de la tesis del enemigo interno. a punta de la tesis del enemigo interno. Pero en ese momento todos los periodistas que podíamos estar en contra de esas estrategias, pues éramos automáticamente clasificados de auxiliadores de la guerrilla. Incluso antes de Álvaro Uribe, aquí los periodistas, como en el caso de mi hermana, fueron asesinados porque tenían una etiqueta de guerrilleros por el hecho de estar buscando historias que tenían que ver con realidades que de pronto no les gustaba que los políticos ni los jefes dee siempre dentro de una realidad política como la colombiana y que hay detrás de toda esta polarización quienes entran y saben muy bien cómo entrar para desestabilizar. cómo entrar para desestabilizar. Yo sé que es muy temprano decir qué fue lo que pasó, qué fue lo que motivó realmente, porque no le podemos... O sea, una gran parte es el clima, estoy de acuerdo. El clima es... Pero no sabemos. Pero no sabemos, ¿verdad? Usted diría que la manera como tenemos nosotros que desactivar como, digamos, sociedad, ¿cuál sería? ¿Cuál sería? Porque lo que no creo que tengamos claro es que la estigmatización sí crea el caldo de cultivo para que otros vengan y hagan lo que hizo este niño contra Miguel Uribe. Sí, lo otro es que también ha hecho carrera desde los años 70 y 80, la idea de que nada funciona, de que nada cambia, de que este país nada logra, lo cual no es cierto. Entonces yo hoy lo primero que yo creo que habría que hacer es pedirle a... Yo le pedí a Ferdinand Cepeda y a los miembros del Senado de la República que muy pronto aprueben la reforma laboral que están conciliando, que demuestren que el Congreso como institución puede hacer un cambio, una reforma laboral en la cual yo en algunos casos estoy de acuerdo y en otras no, pero de eso se trata, de una reforma laboral que tome esa decisión. Con eso yo creo que inmediatamente el siguiente paso es que sometan a votación la segunda convocatoria del presidente. En los cálculos que yo he venido haciendo, parte de mi oficio es que el gobierno tendría entre 39 y 41 votos, no tendría más. Y con eso cerramos el capítulo. La convocatoria a la consulta. No, no. Recuerda que es que el presidente y el ministro mandaron una segunda convocatoria. Ah, entonces que la retiren. No, que la voten. Y le demuestren al gobierno cuántos votos tiene. A menos que el gobierno tenga la sensatez de retirarla. Y el presidente debería olvidarse de esa cosa del decretazo. No, pues el decretazo lo tendría que haber hecho, digamos, en esta semana, ¿no? No sabemos si lo va a hacer o no. Ojalá se abstenga de eso, ¿no? Ojalá se abstenga. Entonces, si usted quita esos elementos, primero muestra que la institucionalidad funciona, que es posible hacer cambios como la reforma pensional, la reforma laboral, la reforma tributaria, lo de Escazú. O sea, que hay cosas que se han hecho, ¿no? No decir que todo es perfecto. No, no. Pero creo que eso es como lo primero que debería ocurrir. Lo segundo, yo sí creo que los medios y los que tenemos alguna posición pública, tú más que yo, a mí me sigue un nichito. Yo tengo un nichito pequeñito de gente. Tengo, yo he estado como tratando de identificar mi nichito. Mi nichito. No, es un tiktoker, muy importante. Yo estoy más en X, en TikTok. Y X también. Sí, en X. Pero mira, me he dado cuenta que tengo como unas 40 personas que todo lo que escribo les parece maravilloso y me aplauden y les agradezco. Y tengo como seis que viven obsesionados conmigo, un periodista ahí de una emisora que viven obsesionados conmigo y cada vez que yo hago o sea, y que me odian pero esos son como los o sea, son cincuenta personas las que me reaccionan no me reacciona nadie más y de pronto las vistas que tengo son como mil y pico dos mil, digamos eso es lo que tengo yo normalmente salvo que algún trino o alguna cosa lo coja alguna persona con o lo coja el algoritmo por alguna cosa que yo a veces no entiendo y me ponen un poquito más. De resto, de resto, ese es como mi nicho. En ese nicho yo asumo la responsabilidad de tratar de bajarle el tono. Creo que no, yo no soy una persona, he tratado de no ser una persona agresiva. Tengo una fórmula margemena y es ya las críticas cuando les contesto y digo y gracias por leer lo que yo escribo. Feliz día. Porque también si la gente no le gusta lo que uno dice, pues no me lea. Y váyase a otra cosa. Pero creo que todos deberíamos desescalar eso. Lo segundo sí creo que está en manos del gobierno y es, aquí no pueden atentar contra ningún otro candidato. Aquí eso no puede, y está en manos del gobierno, reforzar la seguridad al costo que sea necesario. y está en manos del gobierno reforzar la seguridad al costo que sea necesario. Yo hoy me pregunto, nosotros tenemos una cuenta en la firma de cuántos precandidatos presidenciales hay, nosotros teníamos 59, hicimos una depuración porque ya Guillermo Fonsara y yo a Maya no van, sacamos unos nombres, pero nos daba 51, pero en la registraduría y se sacaron estos días un comunicado que tienen 16 candidatos. O sea, que ya se inscribieron 3, 4 y tienen cita para 16 más. O sea, estamos hablando de cuántos. Podrían llegar a ser 70 candidatos. Pero la calle está dura, el desempleo a veces. Ahí te recuerdo, María Gemena, este es un concepto que no es mío, pero me gusta citarlo desde un profesor de la Universidad del Valle que se llama Javier Duque, que dice que es que en Colombia, por las reglas de juego que tenemos, hay presuntos candidatos. O sea, hay gente que no busca ser presidente. Voy a darte un ejemplo. Sino que quiere ser concejal. Claudia López cuando se presentó en el 2016, creo, ella no quería ser presidente. Ella lo que quería era ser alcalde de Bogotá. Es decir, aquí hay candidatos que quieren ser ministros o que quieren que los nombren en embajada. La manera más, incluso uno muy conocido alguna vez me dijo, no, doctor César, es que yo me meto porque con eso mis clientes saben que no me he muerto. Entonces, digamos, muchos de los 70 no son realmente candidatos. Ahí hay mucho presunto candidato. Pero en un clima como el que tenemos, yo creo que varios de ellos deben estar reflexionando y pensando porque es que arriesgar la vida, eso es una implicación muy difícil. Entonces, lo que sí creo es, para ir por paso, primero, con el tema laboral, yo creo que esto debería desactivarse todo este tema, con la aprobación de la reforma laboral conciliada, que haga la conciliación entre Senado y Cámara, que vote la segunda intento de consulta del presidente, que el presidente se abstenga de emitir ese decreto. Y con eso salimos de ese tema. Segundo, yo sí creo que el gobierno tiene que ser, al costo que sea necesario, reforzar la seguridad de todos los candidatos. Y si no pasa eso, porque digamos que eso es lo ideal, eso es lo que uno quisiera, estoy de acuerdo con usted, pero y si no pasa eso, si esta semana, como ya lo anunció el presidente y su nuevo ministro de Justicia, se presenta el decreto o el decretazo, como le están diciendo ahora, para abrirle camino a la consulta y por el otro lado no se llega a una concertación le están diciendo ahora, para abrirle camino a la consulta. Y por el otro lado, no se llega a una concertación en su último debate que tiene en el Senado la reforma laboral. ¿Qué puede pasar? Lo primero es... En medio de este clima tan difícil y áspero. Yo digamos, creo que el doctor Eduardo Montalegre fue muy hábil para ganarse un cargo, un puesto que no tenía, entonces ya lo nombraron. Pero es claro que esa es la peor vía para el gobierno, porque tan pronto salga el decreto, todos los abogados lo han dicho, pues va a ser objeto de una cosa normal que Montesquieu dijo, la salida es esta, cuando el Ejecutivo tiene una interpretación, el Legislativo tiene otra, el Judicial responde. Pero eso puede ser un proceso de ocho o nueve meses. Es decir, tan pronto saquen el decreto, eso va a ir al Consejo de Estado y el Consejo de Estado muy pronto le va a decir, suspenden todo. Y eso nos veremos en junio, julio, agosto del año entrante. Entonces, eso, digamos, creo que ese decretazo le sirvió a Montalegre para conseguir el puesto. Pero pues, digamos, ya le dieron el puesto. El señor estaba desocupado, entonces ya tiene puesto. Ya, digamos, no... Pero yo aspiro que eso no ocurra. Y si ocurre, lo que va a ocurrir es que las instituciones van a funcionar. Y estoy seguro que el Consejo de Estado va a asumir esa competencia. Exacto, en la comisión que tienen que estudiar. Y al presidente le va a tocar esperar. Exacto. Y después, si eso... Ahora, lo que sí aspiro es que el Congreso, el Senado de la República, tengan la buena decisión de aprobar una reforma concertada. Yo aspiraría, si no se hace, a mí me parece que lo que hicieron en la Comisión Séptima fue un error, haber votado eso sin discutirlo. Eso fue un error. Yo creo que cada parlamentario tiene derecho de decidir cómo votar, pero eso que hicieron me pareció que eso estuvo mal. Pero me parece que en este momento vamos en camino a una salida y yo te digo es muy probable que esa reforma tenga 86 votos. Eso es un montón de votos. Bueno, y sí, porque yo creo que hay que desarmar también y decirlo claramente acá que la reacción que tuvieron los partidos como el Centro Democrático, Cambio Radical, con el decretazo fue decir que había un golpe de Estado. Eso no es cierto. A las palabras hay que medirlas y aprenderlas a usar bien y correctamente para no empezar a... Yo creo que todos deberían empezar a pensar y actuar como adultos responsables. Llegando a esta reunión, Marisimela me entero que el presidente convocó a una reunión de todos los partidos. Y encuentro que, y voy a decirlo, yo de los presidentes de Sargaviria tengo una muy buena opinión normalmente. No comparto mucho de lo que hace, pero tengo una buena opinión. Y yo sí le digo a los presidentes de Sargaviria, uno tiene una responsabilidad republicana de que cuando un presidente de la rep República lo convoca a uno, así uno no le va a decir que sí. No lo tienen que validar. Él ya está validado, es el presidente de la República. Uno tiene la obligación moral. Y yo sí le voy a decir al expresidente César Gaviria, por Dios, ¿usted fue presidente de la República? ¿A usted este país lo invistió con el mayor honor que cualquier ciudadano puede tener? ¿Usted tiene ese honor? Pues tiene responsabilidades. Yo no estoy diciendo que vaya y le diga al presidente sí, no, pero vaya y escúchelo. Pero lo mismo hizo el cambio radical. Sí, pero digamos, y en todos esos casos me parece que está mal. Lo mismo yo, por ejemplo, creo que los expresidentes que no van a la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores, me parece muy mal. Hombre, comportesen como adultos. Y sobre todo, yo sí creo que hay una responsabilidad republicana de que cuando el presidente lo convoca a uno, uno va. No necesariamente decirle sí, sino que uno va y escucha. Y ahí decide si le dice que no, y cuando salga diga que no está de acuerdo. Pero uno sí tiene que ir y conversar. Y yo sí le pido a ellos, a los presidentes de los partidos, que hay que aceptar la convocatoria del presidente para escucharlo, no para decirle sí a lo que él diga. Y también yo sí creo que permítame lo digo, María Gemina, en este escenario que yo sé que mucha gente escucha, yo tengo mis dudas de que el presidente haya realmente leído a Hegel. Yo he leído a Hegel y tengo mis dudas. Tengo seguridad de que no ha leído a García Márquez porque si lo leyó no lo entendió. Oye, hoy en día no lo entendió. Y el presidente que deje, o sea, él es el presidente de la República de Colombia, que deje esa verborrea que nada aporta. Sí, divagaciones. Esas divagaciones. Particularmente si él supiera, si uno dijera, ah, sí, esto es la lógica argumentativa, uno diría, bueno, hasta se la reconozco. Pero es que yo hoy, por ejemplo, no se la reconozco. Yo conozco esos textos, los he leído y los he estudiado, pero cuando uno dice, presidente, no invite a nadie a hablar 50 minutos, a escucharlo a usted 50 minutos hablar. Diga lo que tiene que decir y dedíquese a trabajar. Es lo que yo le diría al señor presidente pero también le diría a las otras fuerzas políticas al llamado del presidente hay que acudir ese es mi sugerencia. Y sobre todo no abandonar también esas trincheras en que están es decir, yo sí creo que es importante que salgamos todos de las trincheras en que... Yo invitaría, por ejemplo, al presidente que... Presidente, por un tema de mercadeo, porque eso fue en campaña, que a él le dijeron utilice el lápiz. Entonces, él utiliza un lápiz. El lápiz es un instrumento maravilloso y muy simbólico cuando usted lo tiene y escribe en papel. ¿Te has dado cuenta que el presidente nunca lleva papel? No, es que el presidente nunca escribe ni prepara sus discursos. No, claro, entonces date cuenta que parte un poquito del tema es que él tiene un instrumento que solo se complementa y se vuelve realidad cuando usted coge un papel y lo usa. El uso del lápiz es para escribir. El presidente no escribe. Y el presidente sí debería, ojalá sus estrategas de imagen le digan, lleve unas hojas y por lo menos escriba. Eso ayudaría mucho porque el lápiz como símbolo tendría sentido si el presidente escribiera. Cuando usted escribe empieza a racionalizar y a reflexionar. Y, por ejemplo, un consejo que yo daría al señor presidente es que coja una libreta y escriba sus trinos. Y después escritos a manos sí los ponga en la red. De pronto eso ayuda, es lo que yo diría, pero a todos hay que desescalar. siguen y que siento que están incitando ese discurso de odio, ese discurso de rabia. Yo no bloqueo, pero sí los dejo de seguir. Yo algunas personas sí bloqueo, pero ya no. Los dejo de seguir o los silencio. Dejemos a esas personas en un nicho más pequeño del que ya tienen. Eso es parte de lo que yo creo que y le recomiendo a los que quieran, eso es lo que estoy haciendo yo estos días. Bueno, yo también hago un llamado a la tranquilidad, a tratar de que no nos volvamos todos unas especies de burbujas y desde ahí emitamos nuestros juicios, porque ese es también un pedestal que es falso. Yo creo que es importante haber estado hoy con usted, César, para entender qué es lo que nos pasa a fondo y comprender que esto es mucho más complicado y que en este mundo cualquier hecho de la política hoy por como funciona el mundo hoy cuando uno coge ese vaso conductor le llega a uno y uno sea ciudadano a pie, sea a uno. Y uno, sea ciudadano a pie, sea ministro, sea periodista, sea ciudadano, tiene que ser consciente de que tiene un papel que hacer para defender la democracia. Porque de eso es de lo que se trata. Y yo termino diciéndote esto, don Raimundo. Colombia tiene una fiesta democrática. Colombia hace elecciones. Desde el año 82 hasta el 2022 en Colombia se celebraron 40 elecciones. Distintas. En todas conocimos los resultados a las 7 de la noche o antes. Y en todas aceptamos la transición pacífica del poder. Nosotros hicimos un estudio para el PNUD que se publicó y escuchamos las voces de colombianos en distintos focos, en encuestas y la palabra con la que la gente describe la democracia colombiana es la fiesta democrática. Yo voy a votar feliz. Yo recuerdo a mi papá que me llevaba a votar con él y yo hoy voto con mi hijo. Yo quiero que podamos todos ir en marzo a votar tranquilamente. Creo que hay una responsabilidad de todos. Por continuar esa fiesta democrática. Que no es perfecta. Que tiene problemas. Le agradezco su sinceridad, César. De verdad. Ay, es que este momento no es fácil. Pero fíjese que yo no lo puedo dejar oyéndolo. No lo puedo dejar ir porque quiero que me cuente cómo está ese mapa electoral hoy. Porque seguimos con la cantidad de gente en la mitad. El 81% de las personas no han decidido por qué votar. La gente hoy no está prestando... O sea, en Fontibón... ¿Seguimos así? Sí, la gente hoy está empezando a enterarse. Ninguna encuesta que le diga a nadie que está en 10% le está diciendo que está liderando. Nada. Porque cuando usted está en 10% y el 80% de la gente no ha decidido, usted está en cero o en 19. Entonces, digamos que todo está realmente abierto. Yo entiendo, digamos, que esta es una democracia que ha bajado los costos de entrada para que muchos candidatos lleguen. Y me parece que está bien. Finalmente, las personas que van a lograr sacar las firmas, eso tiene un costo. Digamos, eso vale 600 millones de pesos mínimo. Porque el costo operativo va a hacerlo seriamente. Entonces, eso es un tema. Y luego están los 32 partidos que pueden dar avalos. Yo les digo, no levanten firmas. Hay 32 avales. Finalmente, el proceso institucional, la registraduría, el registrador ya publicó un cronograma que se está cumpliendo. Esto es muy importante decirlo. El cronograma comenzó en febrero y el cronograma de las elecciones se está cumpliendo. La plata está llegando. El gobierno le ha entregado a la registraduría los recursos para hacer las elecciones. Entonces, estamos avanzando. Se va a hacer por primera vez en muchos años, ya se hizo, una licitación pública. Normalmente, ¿qué es lo que pasaba? Que en eso se equivoca el presidente de la República. Los anteriores registradores no podían hacer la licitación porque Hacienda no les daba la plata a tiempo. Yo tengo que reconocer que este registrador ha venido haciendo una labor con Bonilla, luego con Guevara y con este ministro y la plata ha fluido en los tiempos, la razón por la cual hoy están haciendo la licitación entiendo que la licitación no se va a presentar mucha gente, se va a presentar Tomás y pues se van a presentar otras pero que gane alguien en una licitación y el cronograma se va a cumplir, en este momento en ese cronograma ya está la gente pudiendo hacer las firmas, los partidos políticos tienen que decir si van a hacer consulta interna. Todavía no sabemos. Ninguno la ha solicitado. El único que medio ha expresado que quiere es el pacto histórico, pero no sabemos si al final se arriesgan o no. Pero una cosa muy importante es que hay elecciones de juventud en octubre, que también es un horario bonito. Y luego está la inscripción de candidaturas para Senado y Cámara, que será en marzo, y ahí tendremos consulta. Entonces, yo un poco lo que veo es que todavía estamos abiertos. Con Andrés Dávila tenemos un artículo, tenemos una cosa, María Jimena, en Razón Pública, donde presentamos 20 hipótesis sobre el sector. Esta mañana estábamos hablando, hay una hipótesis que ya se disprobó porque nosotros dijimos la violencia no va a ejercer y hoy tengo que decir que sí, que nos equivocamos. Ana Menesky, yo conozco a casi a todos los candidatos presidenciales. No, es que esto no estaba previsto, ¿no es verdad? Yo pensé que habíamos pasado ya esta página, yo también. Yo pensé que habíamos pasado esa página, sí. Y no la pasamos, ¿no? Aún no. El impacto que vaya a tener lo que sucedió el sábado pasado, todavía no lo sabemos, pero de hecho va a tener un impacto en el panorama político que nos conduce a las elecciones del 2026. Y eso todavía no sabemos cómo es, cuál va a ser, ni para dónde va a tirar, digo yo, en sentido figurado. Pero ya va a tener un efecto Pero ya va a tener un efecto. Esto va a tener un efecto. Yo creo que el primer efecto político es que le quita al presidente el tema de la consulta. Así él insista. Yo vengo diciendo esto. El presidente, en el Consejo de Ministros de febrero, él le dijo al país, yo renuncio a gobernar. Y aquí les dejo a Armando Benetti. Él renunció a gobernar. Y quedó perdido el gobierno durante dos o tres meses, hasta que el error de la Comisión Séptima hundió eso y le dio norte a su gestión de gobierno. Pero ese norte se acabó el domingo. Yo creo que el presidente tiene que tener que reconocer la sensatez de que ese tema, esa iniciativa de la consulta popular, le hace daño hoy al proceso electoral colombiano. Y su principal responsabilidad, como presidente de la República, es garantizar que este país pueda ir a elecciones el máximo de tranquilidad posible. Y yo creo que, por eso, creo que contribuiría si el Senado aprueba la ley y todos nos vamos tranquilizando. Pues muchas gracias, César. Le agradezco esa sinceridad y el impacto que nos deja a todos pensar que ya habíamos pasado por ahí y que creíamos haber chuleado esa parte, ¿no? Y no. Yo prefiero eso a un no, como dice usted. Y que ahí estamos, pelechándola. Hasta pronto. A Fondo es un podcast producido por Mafialand. Producción general, Beatriz Acevedo. Producción de audio, Juan Felipe Rojas. Música original del maestro Oscar Acevedo. Nos pueden escuchar también en mi canal de YouTube. Gracias por escuchar. Soy María Jimena Duzán. Gracias por ver el video.